Vitoria. La antigua salida de la N-I hacia Madrid, en el entorno del Alto de Armentia, continúa con su integración en Vitoria. El equipo de gobierno anunció ayer que, "en breve", espera habilitar en la zona dos pasos de cebra con los que se evidenciará el cambio en la carretera, que pasará de interurbana a urbana y, por tanto, dejará de depender de la Diputación alavesa para pasar a ser una competencia del Consistorio.
El grupo municipal de EA preguntó ayer en la comisión de Urbanismo sobre estos pasos de peatones, que no terminaban de fructificar a pesar de que ya en 2009 el Consistorio planteó un acuerdo al Gobierno foral. El concejal del área, el socialista Juan Carlos Alonso, explicó que el primero de estos pasos de cebra ya está proyectado, costará 80.000 euros y será financiado por la Junta de Concertación del sector 16, una zona antes de salida de Vitoria y ahora convertida en una parte más de la ciudad.
En cuanto al segundo paso, en principio más cercano a la rotonda de la zona, aún no se ha planteado porque depende de la firma de un convenio entre las dos instituciones alavesas. La Junta de Gobierno local tiene previsto dar luz verde a esta operación este mismo viernes, para que así se agilice que la carretera pase de depender de la Diputación -que tiene por norma no permitir estos pasos de cebra tan cerca de las rotondas, por el peligro de atascos que conllevan- al Ayuntamiento, que ajustará la ubicación de la medida y espera activarla "en breve".
Tanto EA como PP ya se hicieron eco con anterioridad de la preocupación de los vecinos de la zona, que pedían más seguridad viaria. El gabinete, así, optó por limitar el tráfico en el tramo del entorno del Alto de Armentia que discurre hacia Mariturri -se pasó de 70 kilómetros por hora a 50- e instaló cedas al paso para todos los vehículos que accedían a la rotonda cerca de Renault.