Vitoria. "¿En Bruselas conocen la pretensión de este Ayuntamiento de reservar suelo para la construcción de más viviendas de las que se necesitarán en los próximos 50 años?". Desde Salburua Bizirik lanzaron ayer esta pregunta para contestar al alcalde de Vitoria, Patxi Lazcoz, tras sus últimas declaraciones en las que aseguró que la redensificación se llevará a cabo a pesar del "ruido" generado en los nuevos barrios. La asociación vecinal de Salburua confirmó que, pese que también se anunció que el Ayuntamiento aceptará la mayoría de las alegaciones presentadas, mantendrá su negativa a este proyecto para aumentar la densidad de casas. La entidad, de hecho, apuesta por parar los trámites actuales e iniciar los estudios que determinen cuál será la necesidad de inmuebles de la capital alavesa.

Las casas de Salburua ya se han empapelado con las pancartas verdes de No a la redensificación. Pero la asociación vecinal precisó ayer aún más este mensaje, a través de un comunicado, al apuntar No a esta redensificación. La entidad cree que el proyecto debe ser reconducido, ya que el Ayuntamiento tiene que encargar "unos estudios de necesidad de vivienda en la ciudad, censo de vivienda libre y ocupada, estudios demográficos y, sobre todo, un estudio de necesidades actuales y a medio plazo en Salburua".

Estas peticiones auguran que el camino de la redensificación aún no se ha allanado. El alcalde, durante la bienvenida al nuevo curso político, reiteró el pasado día 15 su confianza en que la redensificación es el camino a seguir. Poco después de defender la candidatura de Vitoria a convertirse en Green Capital europea, donde el jurado censuró el consumo excesivo de suelo de la ciudad en los últimos años, Lazcoz confirmó su apuesta por no consumir más terreno y, por tanto, por que la ciudad crezca hacia adentro. Ésa será la línea a seguir del nuevo Plan General, de la redensificación y de los grupos municipales, donde hay acuerdo en esta cuestión. No así entre los ciudadanos de los nuevos barrios.

El primer edil, no obstante, adelantó que se aceptarán "la mayoría" de las alegaciones presentadas contra el proyecto de las zonas más pobladas de Salburua y Zabalgana. Las nuevas previsiones permitirían unas 6.000 viviendas más en ambas zonas con respecto al planeamiento vigente. El gabinete Lazcoz quiere repetir así la fórmula que ya adoptó en la primera entrega de la redensificación, que se centraba en zonas menos pobladas de los nuevos barrios -y conocida, sobre todo, por las críticas de los vecinos de Ali- y en la que finalmente se llegó a un acuerdo aminorando el número de viviendas.

la respuesta Ahora faltaba por conocer la respuesta de los vecinos, y Salburua Bizirik dice No. El colectivo criticó las palabras "eufóricas" de Lazcoz y su "altanería" al referirse a las protestas vecinales como si fueran "ruido". La entidad levantó la voz para mostrar su apoyo a la teoría de que Vitoria no puede crecer más allá de sus límites actuales, pero no a las formas "impositivas" con que quiere llevarse a cabo. "No aceptaremos una opción mala ni otra peor", apuntó el portavoz de la entidad, Iñigo Lemos.

El colectivo se reafirmó en que esta redensificación debe paralizarse, porque no se puede consumir el suelo reservado para equipamientos sociales, ni actuar contra "los ecosistemas únicos de Salburua". Estas razones se recogen en un manifiesto firmado por 17 asociaciones vecinales, ecologistas y políticas que piden un alto en una redensificación que, desde el equipo de gobierno, tienen claro que debe hacerse "sí o sí". Aún está lejos el punto de encuentro.