La cubierta de Mendizorroza afronta su fase final pero carece de fecha de apertura

Desde el Departamento municipal de Urbanismo confirmaron que se espera dar los pasos definitivos "en próximas fechas", aunque por el momento no se pueden concretar más plazos, aunque está claro que la fiesta de apertura ya no llegará a tiempo para el verano. Ése, al menos, era el objetivo inicial cuando la Junta de Gobierno Local adjudicó de forma definitiva el 12 de marzo de este año el remate de estos trabajos, valorados en más de 1,75 millones de euros. Se trataba, en concreto, de la instalación del vaso, un tramo final del proyecto que, sin embargo, no se tuvo en cuenta durante la anterior etapa del gabinete Alonso, cuando no se adjudicó ni la estructura de las piletas ni la urbanización del entorno, dos olvidos que conllevaron un nuevo retraso en los trabajos. Entonces se calculaba que estuvieran preparados para comienzos de año. No se cumplió. Después se anunció el verano, puesto que la última previsión anunciada por los servicios municipales de Arquitectura era que el vaso estuviera instalado para finales de julio, para así comenzar las pruebas de ensayo, inspecciones y ensayos de todo el edificio.

Estos no son, en cualquier caso, los únicos proyectos ligados a Mendizorroza. El Ayuntamiento, a través del Plan E de Zapatero, también ha impulsado un proyecto de deshumectación y energía solar en el edificio de las cubiertas. En concreto, se trata de un programa vinculado a la eficiencia energética, que permitirá instalar nuevos sistemas de calentamiento de agua. Los trabajos arrancaron el pasado 12 de junio y el plazo de ejecución es de 13 semanas. La fecha prevista para la finalización de la instalación se alcanzó ayer. Sin embargo, los registros municipales también revelan que este trabajo acumulaba un retraso de "cuatro semanas".

La tercera y última de estas actuaciones está vinculada a Kirol Club. El gabinete Lazcoz bautizó de esta forma a un proyecto para impulsar el uso de las instalaciones de Mendizorroza y Gamarra durante todo el año, por lo que se ponía el acento en las actividades deportivas que pudieran realizarse bajo techo, independientemente de las condiciones meteorológicas. Por ejemplo, el fitness. La medida, que obliga a los usuarios a pagar una cuota más cercana a las tarifas de la iniciativa privada, se ha conocido más por las reacciones de los usuarios de los gimnasios que por su novedad.

El Consistorio pretendía activar esta nueva experiencia este otoño y, en concreto, durante el próximo mes de octubre. Esta previsión es, precisamente, la que marca la cuenta atrás para el estreno de la cubierta de Mendizorroza. Cuando se confirme esa fecha, se pondrá punto final a una de las construcciones más complicadas de los últimos años, después de que la reforma de todo el complejo de piscinas se activara en 2005 y, desde entonces, haya superado sobrecostes, fugas de agua, cambios en el proyecto -la cubierta, por ejemplo, redujo en el proceso su graderío- y fallos en las previsiones. Ahora parece que se acerca su fase final. Aunque el Consistorio, por ahora, no se tire al agua con la fecha.