vitoria. El debate sobre las huertas ecológicas aún colea. Los grupos municipales trasladaron ayer al equipo de gobierno sus opiniones en torno la necesidad de ampliar la oferta y a la decisión de establecer un límite de cesión de estos terrenos de cinco años, y no hubo acuerdo final. El tema se abordará en próximas fechas en un nuevo Consejo Rector del Centro de Estudios Ambientales, puesto que esta polémica urge una solución: el Ayuntamiento ya comunicó en su día por carta a varios usuarios afectados que, ante las nuevas condiciones de uso de las parcelas de Abetxuko y Olarizu, debían abandonarlas el 31 de octubre.
El Departamento municipal de Medio Ambiente mantiene su postura de establecer una frontera de uso puesto que, como ya apuntó la concejala del área, Alba Cañadas, este proyecto arrastra una lista de espera de unas 400 personas y, pese a las ampliaciones de las huertas, no hay oferta suficiente para cubrir toda la demanda. Por ello, la idea es establecer ese límite para así facilitar la renovación de usuarios.
La oposición municipal no ve tantos problemas en este cambio en las nuevas adjudicaciones de huertas como en el hecho de que el gabinete Lazcoz no haya negociado con los afectados que disfrutaban de las huertas sin saber que sólo lo harían con un margen de cinco años. De ahí que estos afectados, como ya adelantó este rotativo, se sientan engañados porque "de haber sabido que había ese límite, no las habríamos cogido", apuntó el portavoz de un grupo de 150 afectados que ya ha anunciado una segunda campaña de recogida de firmas contra la decisión municipal.
Estas diferencias han generado durante la última semana reacciones de todo tipo. El PP ya pidió al gabinete Lazcoz que, en lugar de imponer una decisión final, negociara con estos aficionados a la agricultura cómo resolver esta situación. EA apuesta por ampliar la oferta habilitando nuevos huertos en la zona colindante a los bosques de Zabalgana, una medida en la línea de lo que en su día sugirió el PNV de abrir nuevos emplazamientos. Esta posible ampliación de los huertos, en concreto en Abetxuko, contaría con un respaldo mayoritario, pero el problema es su coste: duplicar las parcelas cuesta unos 600.000 euros.
Estas diferencias requieren ahora de un punto de encuentro, puesto que, por ejemplo, algunos usuarios actuales de los huertos ya fueron notificados por carta de que debían abandonar las parcelas el 31 de octubre. El tema se abordará en un próximo Consejo del CEA -que puede convocarse en dos o tres semanas-, dedicado exclusivamente a esta cuestión, donde técnicos municipales explicarán el tema a los partidos. Ahí, en principio, se trazará el rumbo de estos huertos de promoción de la agricultura ecológica.