El cartel de cerrado por vacaciones luce en muchos comercios y locales de ocio durante el mes de agosto en Vitoria. Sin embargo, no sólo algunos hosteleros y comerciantes dejan la rutina y escapan de la ciudad durante este mes; el parón estival se extiende también a los centros cívicos de la capital alavesa.
De hecho, los recintos de Abetxuko, Hegoalde, Ibaiondo, Iparralde, Lakua y Judimendi, entre otros, han echado la persiana. Tan solo abren sus puertas a los gasteiztarras los centros cívicos de Aldabe, El Pilar y el polideportivo de San Andrés, al que los vitorianos pueden acudir a darse un chapuzón en su piscina interior. Además, también pueden acercarse a las instalaciones deportivas de Gamarra -que cerrarán el 9 de septiembre- y Mendizorroza, que permanecerá abierta hasta el próximo 19 de septiembre.
En agosto hay vida en la ciudad aunque, eso sí, a medio gas. De hecho, la actividad sociocultural se estanca durante el periodo estival. DNA ha estado en uno de estos centros cívicos que permanecen abiertos en agosto: El recinto de Aldabe, situado en la calle Portal de Arriaga, en las cercanías del Casco Viejo de Vitoria.
Aunque el centro permanece abierto durante este mes, no todas sus instalaciones lo están. De hecho, sólo se puede acceder a la piscina interior, la sala de encuentro, la biblioteca, las instalaciones deportivas y se mantienen activos el alquiler de infraestructuras y el préstamo de bicicletas. La ludoteca -un lugar de juego, encuentro e investigación que ofrece Aldabe a niños de 0 a 8 años-, la Gazte Factory -zona de juegos recreativos con futbolines y mesa de ping pong- y la infoteca -sala de ordenadores- se encuentran cerrados este mes.
Enrique Villacorta y Gregorio Arnaiz son dos jubilados que cada día, sea invierno o verano, acuden al centro cívico Aldabe a pasar la mañana leyendo la prensa diaria -o en el caso de Enrique, completando los pasatiempos que incluyen en su interior los diarios-. "Ahora, en agosto, hay menos gente, por lo que no hay problema para conseguir el periódico que quieras", explica Arnaiz. Además, según su amigo Villacorta, "en Aldabe ofrecen las fotocopias de los pasatiempos para que el usuario no tenga que esperar a que quien tenga el diario termine de leerlo", añade. Por otro lado, ambos consideran que tres centros cívicos abiertos en agosto son suficientes, "porque viene menos gente". Además, aseguran que no tienen queja alguna sobre los centros socioculturales de la ciudad. "Aquí hacemos buenas amistades, jugamos al ajedrez y, además, las responsables del centro son muy agradables y atentas", afirma Villacorta.
Por otro lado, en la sala de encuentro del recinto se encuentran Katia Gato, Laura Calzadilla y Susana Díaz. Pertenecen a la asociación cultural Amaru y se han reunido en el recinto para trabajar en un proyecto de cooperación y desarrollo en Perú. Ellas, por el contrario, creen que debería haber más centros cívicos abiertos en agosto, o por lo menos, que alguno abriera sus puertas en fiestas. "No todo el mundo está de vacaciones, hay gente que también trabaja en agosto", explica Katia Gato. Respecto a las mejoras que se podrían acometer en Aldabe, aconsejan que "se separe la zona de los niños de la de los mayores". "No porque los más pequeños molesten, sino porque la zona adulta ocupa más", especifica Susana Díaz. Además, se quejan de que las salas "son muy pequeñas". Por otro lado, proponen que se acondicionen las espacios comunes para realizar otro tipo de actividades: "Tenemos problemas con el material que nos facilitan".
A Paula y a Ane -dos niñas de nueve y siete años, respectivamente- les encanta "pintar y colorear", según su abuela Isabel Pascual. De hecho, las pequeñas han pasado la mañana entre lápices de colores. Durante el año suelen acudir al centro cívico Hegoalde, pero al encontrarse cerrado se han desplazado hasta el de Aldabe. Sin embargo, consideran que no son necesarios más centros cívicos abiertos en agosto. "En estas fechas no viene mucha gente, la mayoría están de vacaciones", explica la abuela de las niñas. Además, Ane, la pequeña de siete años, asegura que prefiere acudir a Aldabe: "tienen dibujos de Bob Esponja".
Izaskun Zulueta, de 17 años, y su amiga Goretti Elorza, de 18, hacen uso de las instalaciones del centro únicamente en verano. En concreto de las piscinas interiores. Se han desplazado desde la zona de Santa Lucía, por lo que demandan más centros cívicos abiertos en agosto.
l Sala común. El espacio de encuentro de Aldabe acoge durante todo el año a los vitorianos que se acercan a leer la prensa diaria y a pasar el día con juegos de mesa.