técnico del centro de estudios ambientales
vitoria. El proyecto de huertos ecológicos arrancó en Vitoria prácticamente como una experiencia piloto hace doce años y, ahora,
ha suscitado el interés de zonas tan dispares como Gipuzkoa, Cantabria, Valladolid o Canarias. Toda una confirmación del éxito. La iniciativa, además, arrancó con el objetivo de ofrecer un servicio a gente mayor de la ciudad pero, ahora, dado el interés surgido entre los jóvenes por la alimentación saludable, el Ayuntamiento realiza cada año el concurso de nuevos agricultores dividiendo a los usuarios entre dos grupos: uno para los vecinos de 18 a 55 años y otro para los mayores.
El hecho, además, de que las huertas se adjudiquen por sorteo ayuda a conformar grupos muy heterogéneos. Las mujeres, por el momento, representan el 40% de estos agricultores aficionados, y hay quienes conocen el mundo agrario y "quienes no habían visto una azada en su vida", cuenta el técnico del Centro de Estudios Ambientales Iñaki Febrero. Este instructor valora la atención que brindan los usuarios a los expertos y el esfuerzo que dedican al huerto. No en vano, para mantenerlo en buen estado hay que dedicarle entre diez y 15 horas por semana. Y la gente cumple de sobra: "Hay quien acude todos los días, almuerza aquí y hace grupo con otros usuarios", cuenta Febrero. Ahora, de hecho, arranca la época de mayor asistencia a los huertos. Un esfuerzo que luego da sus frutos.
jubilado y aficionado a la agricultura