vitoria. Hace ya tres años recibió el reconocimiento del Colegio Oficial de Arquitectos Vasco Navarro por sus 25 años en la profesión. ¿Qué supuso el diseño de Los Herrán para su carrera?
Fue un proyecto importante por la repercusión que tuvo en la ciudad, por su emplazamiento y por su uso.
La arquitecta Rocío Peña Ganchegui, que preparara un proyecto para recuperar el diseño original de la plaza de los Fueros, aseguraba hace una semana que la arquitectura busca con demasiada frecuencia ser revolucionaria en cada actuación. ¿Está de acuerdo?
Lo estoy. La arquitectura es un arte, pero tiene una faceta funcional y social. No podemos hacer algo porque nadie lo haya hecho; también tenemos que tener en cuenta el coste, si responde a los objetivos solicitados, si cumple su función social... Los arquitectos tenemos que asumir que vivimos un tiempo y desaparecemos, pero nuestras obras quedan. Para bien y para mal.
¿Buscamos demasiado una revolución semejante al Guggenheim?
El Guggenheim es un edificio emblemático, que ha tenido mucha importancia en la reordenación urbana de toda la margen de la ría de Bilbao, pero tiene otro factor fundamental: tiene una fundación detrás que potencia sus actividades.
¿El soterramiento puede ser el Guggenheim de Vitoria?
Depende de lo que se haga.
Es la gran pregunta que se realizan los ciudadanos.
El soterramiento hay que hacerlo. Es una barrera a eliminar desde el punto de vista urbanístico. Luego está el qué se haga y para qué. Los políticos deben marcar la línea, pero espero que oigan el sentir social y el profesional. Porque a veces a los arquitectos ni se nos ha escuchado.
¿Cuáles diría que son los edificios emblemáticos de Vitoria?
No me atrevo a contestar.
Al menos sí podrá contar qué muestra de la ciudad a los amigos que la visitan...
Lo primero, el Casco Medieval y el Ensanche. Como conjunto, es lo que caracteriza a Vitoria. También hay edificios singulares, pero no diría sólo cuatro o cinco.
Imagino que esa preferencia por el Casco le viene de familia (su padre, Luis María Sánchez, fue en su día gerente del Casco Medieval). ¿Qué le parece la revitalización que se está llevando a cabo?
El Casco Medieval tuvo un periodo muy importante de desarrollo, en infraestructuras y potenciación de la actividad comercial, pero en un momento dado languideció. No sé por qué. Y parece que ahora hay intención de retomar esa senda.
¿Es posible partir, de inicio, con el objetivo de diseñar un edificio emblemático o eso es algo que sólo pueden dar los años? ¿El Palacio de Congresos será un edificio emblemático?
La función crea la forma. El auditorio, palacio de la música o como se quiera llamar estará muy bien mientras tenga un contenido. Pero primero tenemos que enseñar a la gente a disfrutar con la zarzuela, la ópera, con lo que quieras. Y debería empezarse a hacer ya, con los espacios que tenemos.
¿Teme que se lleve a cabo el auditorio y no se llene?
Que no se llene o que no cumpla las expectativas. Y hago una pregunta a la que no voy a responder: ¿qué es más importante, una estación de autobuses o un auditorio?, ¿cuál de los dos va a cumplir una función social mayor? Yo estaría encantado de que fuera necesario el auditorio de Vitoria, pero tengo mis dudas.
Usted también mostró públicamente sus dudas sobre el tranvía en Vitoria. ¿Ha cambiado de opinión tras ver los resultados de uso?
Sigo teniendo esas dudas. El tranvía da servicio a dos barrios de Vitoria para llegar al centro, y sigue sin resolverse el estudio de movilidad de Vitoria. Es que todavía no conozco el Plan de Movilidad.
Ahora es más conocido, tras activarse las nuevas líneas de Tuvisa.
Creo que se están llevando a cabo actuaciones, pero sin un hilo conductor. Todo debería responder a un plan. No se pueden resolver las líneas de autobuses si no se ha solucionado su relación con las bicicletas o los coches.
