vitoria. Dos años han pasado desde que las piscinas de Gamarra resucitaron de la mano de una ambiciosa reforma integral. Pero va a ser en 2010 cuando los trabajadores del parque municipal dispongan de unos buenos vestuarios. El gabinete de Patxi Lazcoz aprobó ayer en la Junta de Gobierno Local el expediente para la contratación de las obras del acondicionamiento de uno de los edificios para que el personal tenga donde asearse y cambiarse de ropa. Un nuevo gasto que se suma al millón de euros que Vitoria invertirá en la instalación del riego automático.
La nueva actuación afectará a una superficie de 200 metros cuadrados dividida en dos volúmenes de igual tamaño. Serán cuatro los vestuarios que se habilitarán en el espacio, y cada uno de ellos contará con tres duchas, tres lavabos, dos inodoros y un mínimo de treinta taquillas.
Cerca de cien empleados se beneficiarán de los nuevos vestuarios, cuya obra está presupuestada en un total de 464.000 euros. Si el proceso administrativo se agiliza, los trabajadores podrán estrenar instalación en verano. Según las previsiones del equipo de gobierno, una vez que se adjudique el contrato, las obras se prolongarán durante seis meses.
Desde que se llevó a cabo la reforma, Gamarra ha registrado un incremento significativo de usuarios. El balance de los últimos veranos lo demuestra. El año pasado, cuando Mendizorroza funcionó a medio gas -con la zona tropical-, las piscinas del norte de Vitoria superaron en afluencia a las del sur.
