Vitoria. La subcontratación de servicios se ha convertido en el pan de cada día en el Ayuntamiento de Vitoria. Y, precisamente por ello, en un importante punto de fricción entre el comité de empresa de los funcionarios y el equipo de gobierno en su negociación del convenio. En cualquier caso, más allá de este conflicto laboral, Ezker Batua quiere que el Consistorio reflexione sobre la fórmula de gestión indirecta porque, según explica, genera empleos con "pocos derechos sociales y bajos salarios" y "perjudica a la calidad de los servicios". Por eso, acudirá este viernes al Pleno con una propuesta.

EB presentará una moción por la que solicita al Consistorio dos cosas: que realice un estudio acerca de las condiciones laborales de los trabajadores subcontratados y que se comprometa a impulsar empleos estables y con derechos en los servicios municipales externalizados. Eso sí, limitando la subcontratación todo lo posible. Según explicó ayer a este periódico el portavoz del grupo, José Navas, "son ya muchos los servicios públicos que se prestan a la ciudadanía por parte de empresas privadas, y gracias a estas privatizaciones las empresas evitan las obligaciones y garantías que impone la ley de Función Pública, lo que trae consigo una diferenciación de derechos".

EB considera que, en esa inclinación por la gestión indirecta, el Ayuntamiento está abandonando la defensa del servicio público y propiciando "empleos de muy baja calidad en cuanto a los derechos sociales y en cuanto a la cobertura económica". En este sentido Navas lamentó que, a pesar de que cada vez es más lo que el Consistorio ofrece al ciudadano, "no se ha incrementado proporcionalmente el empleo directamente, lo que afecta a la calidad de esos servicios prestados y a la generación de empleo con pocos derechos".

El portavoz del grupo municipal quiere que el Consistorio haga de una vez por todas borrón y cuenta nueva. Según resaltó, el ejecutivo local liderado por el socialista Patxi Lazcoz "tiene que ser una institución ejemplarizante, un referente para el conjunto de empresas de nuestra ciudad a la hora de contratar, y debe dar garantía de generar empleo de calidad". Esto último, añadió, no es lo que ahora sucede. Navas aseguró que "se da la paradoja de encontrar trabajadores subcontratados que están haciendo las mismas funciones que un trabajador municipal en condiciones laborales y económicas claramente discriminatorias".

A la espera de lo que diga el equipo de gobierno al respecto, los funcionarios siguen manifestando su temor a que el Consistorio aumente las subcontrataciones. De hecho, el comité de empresa quiere que el gabinete de Lazcoz ponga por escrito su compromiso de no externalizar más servicios. En tiempos de crisis, los representantes de los trabajadores municipales prefieren centrarse en la estabilidad más que en las demandas monetarias. Y, ahora mismo, temen que los puestos de limpieza y ayudantes de oficios sean los primeros en tambalearse.