vitoria. Casi la mitad de las calles de Vitoria tiene una iluminación excesiva. El Ayuntamiento, así, pretende modificar este alumbrado para reducir el consumo energético de la ciudad, puesto que sólo en 2008 se gastaron 3,8 millones de euros en alimentar las farolas. Para buscar la mejor solución, el gabinete Lazcoz pretende realizar una prueba en la calle Zapatería a comienzos del próximo año.

Esta iniciativa surge a raíz de un reto planteado por el Ministerio de Medio Ambiente, que animó a las ciudades a rebajar un 35% el gasto del alumbrado. El Consistorio gasteiztarra respondió encargando el pasado mes de marzo una auditoría que, a través de una unidad móvil, detectó las deficiencias de los más de 32.000 puntos de iluminación distribuidos por el término municipal. Los resultados evidencian que hay margen de mejora en un sistema que copa el 57% del consumo municipal en electricidad.

El 28% de los espacios públicos ha logrado una iluminación correcta -si se compara la calidad de la luz y su coste energético-, pero el 48% peca de exceso de iluminación, un 19% tiene luz insuficiente, y del 5% restante aún no se han recabado datos suficientes. El alcalde, Patxi Lazcoz, explicó que el objetivo ahora es evitar un despilfarro en el consumo y que eso no tiene por qué suponer una iluminación peor. Como ejemplo, se refirió a las farolas coronadas por una bola de cristal transparente, que deberán ser modificadas para que no iluminen hacia arriba.

Las pruebas piloto arrancarán a principios de 2010 en la calle Zapatería. Como ya adelantó este rotativo, el Consistorio probará tres sistemas en tres tramos: el actual, una iluminación con catenaria y otra con nuevas lámparas.