Estados miembros occidentales del Consejo de Seguridad han condenado este jueves en una sesión de urgencia que el Gobierno de Bielorrusia ponga vidas de seres humanos "en peligro" con "fines políticos" con la "instrumentalización orquestada" de los migrantes que están atrapados en las fronteras de Bielorrusia con países de la Unión Europea, en particular con Polonia.

Estados Unidos, Reino Unido, Estonia, Francia, Irlanda, Noruega y Albania han emitido una declaración conjunta en el marco de la reunión del Consejo de Seguridad de la ONU sobre la situación, que, han lamentado, tiene el "objetivo de desestabilizar a los países vecinos y la frontera exterior de la UE". Esto, según la declaración, busca, a su vez, "desviar la atención" de las "crecientes violaciones de Derechos Humanos" ejercidas por parte de Minsk.

"Esta táctica es inaceptable y exige una fuerte reacción y cooperación internacional para que Bielorrusia rinda cuentas. Demuestra cómo el régimen de (el presidente, Alexander) Lukashenko se ha convertido en una amenaza para la estabilidad regional", han advertido los mencionados países.

De este modo, han reclamado a las autoridades bielorrusas que pongan fin a "estas acciones inhumanas" y que "no pongan en peligro la vida de las personas", al tiempo que han solicitado que las organizaciones internacionales "tengan acceso inmediato y sin obstáculos a las personas que se encuentran allí para prestarles ayuda humanitaria".

En este sentido, ha expresado su "profunda preocupación por la grave situación de los migrantes", por lo que han insistido a Minsk que "proporcione y facilite una protección y atención adecuadas."

El embajador adjunto de Rusia ante la ONU, Dmitry Polyanskiy, ha rechazado las acusaciones de los países occidentales del Consejo y ha acusado a Polonia y Lituania de maltratar a los migrantes.

"Hay muchos casos en que los guardias fronterizos polacos y lituanos golpean a los migrantes y los empujan de regreso al territorio bielorruso", ha dicho el embajador de Moscú, aliado de Minsk, recoge la cadena BBC.

POSIBLE "CONFLICTO MILITAR"

Por otro lado, los ministros de Defensa de los países bálticos han advertido de que los cuellos de botella de migrantes, que según la UE están siendo creados deliberadamente por Minsk, amenazan una amplia sección del flanco oriental del bloque, e incluso podrían desencadenar un conflicto militar.

"Se reúnen grandes grupos de personas y se les transporta a la zona fronteriza, donde se les obliga a cruzar la frontera ilegalmente. Esto aumenta la posibilidad de que se produzcan provocaciones e incidentes graves, que también podrían extenderse a la esfera militar", han avisado en una declaración conjunta Kalle Laanet, de Estonia, Artis Pabriks, de Letonia, y Arvydas Anusauskas, de Lituania.

El miércoles, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, aseguró que el bloque europeo y Estados Unidos coordinarán sus acciones para responder al "ataque híbrido" de Bielorrusia contra las fronteras europeas, incluyendo sanciones contra aerolíneas que "faciliten el tráfico de seres humanos" a Minsk.

Por su parte, Lukashenko ha amenazado este jueves con cortar el tránsito de gas hacia los países de la Unión Europea (UE) en caso de que el bloque anuncie nuevas sanciones, al tiempo que ha ordenado supervisar los "movimientos de tropas" de la OTAN y Polonia en la frontera.

Mientras, centenares de personas, entre ellos niños, permanecen a la intemperie a temperaturas casi gélidas a lo largo de la frontera de Bielorrusia con la UE. Algunos tienen tiendas de campaña, otros sólo tienen el bosque cercano como refugio.

Procedentes en su mayoría de Oriente Próximo, están atrapados entre el régimen de Lukashenko, acusado de ayudarles a llegar a la zona fronteriza, y el rechazo de las autoridades polacas a dejarles entrar.