- La gran coalición de Angela Merkel entra en su recta final con la dimisión de la titular de la Familia, Franziska Giffey, el tercer relevo en un Ejecutivo de la canciller por sospechas de plagio en un doctorado, con posibles efectos colaterales para el Partido Socialdemócrata (SPD) de la ministra.

“Hice mi tesis doctoral con el máximo rigor posible. En los últimos días surgieron de nuevo discusiones sobre mi disertación del año 2010 y he decidido pedir a la canciller el relevo de mi cargo”, apuntó en una declaración Giffey, de 43 años y al frente del Ministerio de la Familia, la Juventud y la Mujer desde 2018.

Giffey fue en la primera fase de la presente legislatura una de las ministras más populares de Merkel. Se la consideró favorita para asumir el liderazgo del SPD, pero su reputación quedó en entredicho a raíz de la revisión de su tesis doctoral -sobre política europea- en la Universidad Libre de Berlín.

No se demostró que hubiera plagio, pero sí déficit de rigor académico. Giffey decidió en 2020 dejar de utilizar el título de doctora, con el compromiso de retirarse como ministra de surgir nuevas dudas, lo que se materializó ahora, a pocas semanas de que la Universidad emita un nuevo informe sobre su caso.

La retirada de la ministra socialdemócrata se produce a cinco meses de las elecciones generales. Corresponde al SPD designar a un sucesor, lo que el partido ha resuelto dejando que asuma esas competencias la titular de Justicia, Christine Lambrecht. Nada apunta a que el relevo sacuda a la coalición en su recta final hasta la despedida del poder de Merkel. Ni al bloque conservador de la canciller ni a sus socios les conviene darle a la cuestión un mayor revuelo.

Los conservadores, liderados por el centrista Armin Laschet, ocupan la segunda posición en intención de voto, con dos puntos por detrás de los Verdes de Annalena Baerbock. El SPD está diez puntos por debajo de los ecologistas.