- La vicelehendakari segunda y consejera de Trabajo y Empleo, Idoia Mendia, se comprometió ayer a actualizar las cuantías de la Renta de Garantía de Ingresos (RGI) el 1 de enero de 2023 a las personas que tengan reconocido el derecho en esta fecha si la ley que regula este sistema es aprobada antes de que finalice 2022. Mendia trasladó este compromiso a los grupos parlamentarios durante su intervención en la Cámara vasca, donde detalló los pormenores del Proyecto de Ley del Sistema Vasco de Garantía de Ingresos e Inclusión aprobado la pasada semana.

Este proyecto incluye un aumento de la cuantía de la RGI y la mejora de los requisitos para acceder a ella para las unidades de convivencia más vulnerables, como las que cuentan con menores y con pensionistas entre sus miembros, entre otras novedades.

La consejera se mostró dispuesta a colaborar con el Parlamento Vasco e insistió en su intención de que la norma pueda ser aprobada antes de que acabe este año.

“No pretendemos marcar los tiempos parlamentarios”, precisó Mendia, tras recordar que, en todo caso, la ley entraría en vigor tres meses después de recibir el aval parlamentario, que tiene garantizado con el apoyo de PNV y PSE-EE, aunque la vicelehendakari confía en que reciba el respaldo de más grupos.

Para adelantar las mejoras planteó una propuesta. “Les ofrezco un primer acuerdo, una primera enmienda con la firma de todos los grupos, que podemos hacer constar también en la ley. Para eso la ley debería aprobarse a tiempo y (la actualización de la cuantía de la RGI a 1 de enero de 2023) se incluiría en los presupuestos de 2023”.

Mendia insistió en que esta ley no es una reforma sino una norma “más moderna” que pone las cosas “más fáciles a las personas en situación vulnerable” y que permite gestionar mejor los recursos públicos. Todos los grupos se mostraron abiertos a hablar para mejorar el texto.

En este sentido, desde EH Bildu, Nerea Kortajarena aseguró que el proyecto incorpora avances y mejoras, aunque ha opinado que todavía se pueden introducir más, como la relativa a rebajar la edad de acceso a esta prestación, de 23 años con carácter general. “El Gobierno nos encontrará en el intento de ampliar derechos, de arreglar disfunciones y garantizar vidas dignas”, indicó.

David Soto (Elkarrekin Podemos-IU) puso sobre la mesa la disposición de su grupo a la negociación para alcanzar acuerdos, porque la ley es una “herramienta fundamental para ofrecer cohesión social, sobre todo frente a los discursos que hablan de fraude y criminalizan”.

Por su parte, Laura Garrido (PP+Cs) mostró la posición “absolutamente constructiva” de su coalición para “ensanchar acuerdos”, pero desde una postura de exigencia para que sea una “oportunidad para conectar definitivamente las ayudas con la empleabilidad”.

l Vulnerables. La nueva norma mejorará la vida de muchas mujeres, menores, pensionistas, jóvenes, personas refugiadas, víctimas de trata, personas con discapacidad, o víctimas del terrorismo.

l IMV. La RGI integra de forma natural el Ingreso Mínimo Vital (IMV). “Pasamos de una Ley para la Renta de Garantía de Ingresos y para la Inclusión Social a una Ley del Sistema Vasco de Garantía de Ingresos e Inclusión, que dé coherencia al modelo, una ley que garantice ingresos y que garantice la inclusión, social y laboral”.