- Otra nueva norma enreda aún más el panorama sobre la obligatoriedad de las mascarillas. Dado que las compañías aéreas venían exigiendo a los gobiernos que revisaran los requisitos en los vuelos, las autoridades europeas, en concreto la Agencia de Seguridad Aérea de la UE (EASA) y el Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC), han decidido eliminar la recomendación del uso obligado de mascarillas en aviones y aeropuertos. Será a partir del próximo 16 de mayo.

Hay que recordar que la exigencia de mascarilla en los transportes fue una de las primeras restricciones que se impuso para hacer frente a la pandemia. Por eso, al mismo tiempo que aconsejan su eliminación, señalan que el cubre bocas es una de las mejores protecciones contra la transmisión de covid-19.

Con el lío ya servido, los vuelos hacia o desde un destino donde todavía se requiere el uso de mascarillas en el transporte público -como es el caso de España- deben seguir manteniéndola, según las recomendaciones europeas. Porque la implantación o no de la retirada sigue quedando en manos de las autoridades sanitarias de cada país.

Hay que señalar que hay once estados de la Unión Europea que ya han levantado esa obligación, y aunque todavía hay discusión entre los expertos comunitarios sobre si es prematuro o no relajar el uso de la protección facial, es más que probable que, con la llegada del verano, otros países se sumen próximamente a su retirada en el transporte. “A partir de la próxima semana, las mascarillas ya no tendrán que ser obligatorias en los vuelos en todos los casos. Para pasajeros y tripulaciones aéreas, este es un gran paso adelante en la normalización de los viajes aéreos”, aseguró el director ejecutivo de EASA, Patrick Ky.

Sin embargo, los pasajeros deben comportarse de manera responsable y respetar las elecciones de los demás viajeros a su alrededor. “Si un pasajero está tosiendo y estornudando debería considerar seriamente usar una máscara facial, para tranquilidad de los que están sentados cerca”, aseguró ayer el director ejecutivo de la Agencia de Seguridad Europea, Patrick Ky.

Y es que en un momento de repunte evidente del virus, con una circulación masiva, y desde un punto de vista sanitario, algunos expertos manifiestan sus dudas sobre la supresión de las protecciones faciales y apuestan por plantear medidas más conservadoras.

Para el director del ECDC, Andrea Ammon, “a pesar de que los riesgos persisten, hemos visto que las vacunas han permitido que nuestras vidas comiencen a volver a la normalidad”, explicó.

Las nuevas recomendaciones sobre el uso de mascarillas entrarán en vigor a partir del 16 de mayo. Pero las reglas para las mascarillas seguirán dependiendo de la aerolínea más allá de esa fecha.

Por ejemplo, los vuelos hacia o desde un destino donde todavía se requiere el uso de mascarillas en el transporte público deben seguir usándolas. Los pasajeros vulnerables deben mantenerla independientemente de las reglas, idealmente una tipo FFP2/N95/KN95 que ofrezca mayor protección.

También se insta a los pasajeros a observar las medidas de distanciamiento en áreas interiores, y en el aeropuerto. Además, el texto se muestra inflexible con los que no cumplen y apostilla que a “los pasajeros que se nieguen a cumplir las medidas se les debe negar el acceso al edificio terminal del aeródromo, a la cabina de la aeronave, o se les debe desembarcar”. l

Llevar mascarilla en el transporte público en Francia dejará de ser obligatorio a partir del lunes 16 de mayo, anunció ayer el ministro de Sanidad, Olivier Véran, que insistió en que sigue siendo recomendable utilizarla.

Justificó el fin de la prohibición porque “la situación mejora” y aunque la pandemia no ha terminado, el número de casos está disminuyendo, y esta tendencia persistirá con el verano.

Costa Rica publicó ayer un decreto que elimina el uso obligatorio de la mascarilla, y además otro decreto que mantiene la obligatoriedad de la vacuna.