- La Federación de Euskadi de asociaciones de familiares y personas con enfermedad mental (Fedeafes) ha planteado en el Parlamento Vasco la necesidad de incrementar los recursos intermedios, como la atención domiciliaria, los hospitales de día y los programas de tratamiento intensivo especializado, para prevenir que las enfermedades mentales entre los jóvenes se agraven y requieran de un ingreso hospitalario. En el informe presentado ante la Comisión de Salud se recuerda que la Encuesta de Salud de Euskadi de 2018 cifró en un 7,8% la prevalencia de síntomas de ansiedad y depresión entre las personas adolescentes y jóvenes de 15 a 24 años.

Además, el estudio de Fedeafes señala que las personas jóvenes de entre 18 y 24 años han sido quienes han sufrido un mayor impacto psicológico a causa de la pandemia en comparación con otros grupos de edad. De esa forma, un 42% de las personas que se sitúan en este tramo de edad ha llorado debido a esta situación, un 30% ha tenido ataques de ansiedad o pánico, un 44% ha sentido miedo a que pueda morir algún familiar.

A su vez, los familiares solicitan que se pongan en marcha mecanismos que permitan contar con psiquiatras y psicólogos especializados en el ámbito de la salud mental infanto-juvenil, a través de las especialidades en psiquiatría infantil y psicología infantil y de la formación permanente de las y los profesionales en este ámbito.