- Las prisiones vascas registran 94 contagios por covid-19 entre sus internos, de los que 70 corresponden a un brote detectado en el centro penitenciario de Martutene. Además, un total de 19 funcionarios de las prisiones vascas se han contagiado. En total 113 afectados por coronavirus.

La consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, Beatriz Artolazabal, informó ayer de la incidencia de la pandemia en las cárceles vascas y por territorios, señaló que en este momento hay en Araba 22 personas internas contagiadas, de las que 14 saldrán de la cuarentena “en breve”. En Gipuzkoa hay 70 contagios y once “indeterminados” a los que se les va a hacer una nueva prueba, mientras en Bizkaia hay dos contagios entre sus reclusos.

Artolazabal recordó que en este momento la sociedad vasca se encuentra con una alta incidencia de los contagios, y subrayó que esa situación también se ha trasladado al centro penitenciario de Gipuzkoa. Según informó, se ha puesto en marcha una “actuación preventiva” ante el brote detectado. “Ante la sospecha de un caso, se hizo un test de antígenos a la persona que tenía síntomas y a sus contactos más estrechos, y se hizo posteriormente un cribado que dio lugar a la situación en la que nos encontramos”, aclaró.

Beatriz Artolazabal aseguró que “se ha actuado en una forma responsable, de forma diligente para garantizar la salud de las personas privadas de libertad que se encuentran en el centro penitenciario de Gipuzkoa”. “Se ha colaborado de una forma muy estrecha entre la dirección del centro penitenciario con el Servicio de Salud que se encuentra en Martutene”, recalcó. La consejera afirmó que, en este momento, de las 70 personas que han dado positivo en covid, cincuenta de ellas son asintomáticas y veinte presentan síntomas “muy leves”. “Por lo tanto, no existe un problema de salud”, subrayó la responsable de las prisiones vascas.

No obstante, reconoció que la situación pandémica es variable y, por tanto, es necesario adaptar los protocolos, “al igual que se está haciendo en otros sectores”. Al respecto, ha indicado que el pasado lunes 10 de enero se distribuyó en los centros penitenciarios unas nuevas normas que se adaptan al periodo la alta transmisión que se está produciendo en el conjunto de la sociedad vasca.

Preguntada sobre el origen del brote en Martutene, Artolazabal explicó que no conocen el foco, y recordó que actualmente la pandemia está en una situación de transmisión comunitaria en la sociedad vasca. Además, destacó que el cribado masivo realizado en el centro penitenciario se realizó con el objetivo de concretar cuáles eran las personas que estaban afectadas para “poder ayudarles y facilitarles las medidas sanitarias que necesitaran”. Artolazabal destacó que el cribado se realizó con la colaboración de los funcionarios de prisiones y también de las personas privadas de libertad que se encontraban en el centro que “entendieron perfectamente la situación que se estaba dando, las medidas que había que adoptar”.

En este momento, el 95% de la población reclusa de los tres centros penitenciarios está vacunado y también el personal que trabaja en los centros penitenciarios.