- La entrega del marido y supuesto asesino de Sara Pina Yeregui se demorará varios días, al menos hasta la próxima semana. José María Uruñuela Ansó, de 41 años, fue trasladado ayer a París, donde permanecerá hasta que las autoridades judiciales francesas autoricen su entrega al juzgado de Tutera que instruirá el caso.

Las fuentes consultadas señalaron ayer que el procedimiento podría dilatarse si el supuesto autor de la muerte de la vecina de Tutera se opusiese a su traslado a Nafarroa En cualquier caso, dado la entidad del delito investigado -un supuesto asesinato-, la orden europea de detención y entrega al juzgado de la capital ribera sería ineludible, según las mismas fuentes.

En este sentido, la puesta a disposición judicial de José María Uruñuela no se produciría, como muy pronto, hasta la próxima semana, un plazo que podría ampliarse en el caso de que el investigado se resista a la aplicación de la euroorden de detención y entrega.

El supuesto autor de la muerte de Sara Pina fue detenido el martes por la tarde en la localidad francesa de Boisredon, a 500 kilómetros de Tudela y unos 70 kilómetros al norte de Burdeos, tras ser detectado por el GPS de su furgoneta. Gendarmes del departamento francés de Charente-Maritime localizaron al sospechoso y lo arrestaron en el interior de su vehículo, en el límite con el departamento de Gironda.

Durante la jornada de ayer, el presunto asesino de Sara Pina fue trasladado a París, señalaron fuentes judiciales, que indicaron que la entrega podría producirse en la muga o, bien, ser trasladado directamente a Tutera.

Mientras, más de 500 personas asistieron en la tarde de ayer al funeral que se celebró en la parroquia San Juan Bautista de la localidad ribera de Cortes en recuerdo de su vecina Sara Pina.

La parroquia cortesina se quedó pequeña y muchas personas se tuvieron que quedar fuera para acoger a todos aquellos que desde muy diversos municipios riberos llegaron hasta la localidad para acompañar a Lucio y Cristina, sus padres, y a Adrián, su hermano. Una comitiva formada por unas 200 personas acompañaron a pie a la familia hasta las puertas de la iglesia.

Su llegada al templo estuvo acompañada de un impresionante y respetuoso silencio, reflejo del dolor y la consternación con la que todo el pueblo miraba a Sara y a su familia.

En la homilía, el sacerdote hizo un especial hincapié en mostrar el apoyo del pueblo a la familia a quien pidió que no se dejasen llevar “ni por la ira ni por el rencor” y muy al contrario debían “perdonar” para tratar de vivir con el “mismo amor con el que vivía Sara en su vida”. Igualmente el párroco pidió a la sociedad que “termine ya la lacra de la violencia contra las mujeres”, algo que más tarde han repetido al realizar una petición para que “termine todo tipo de violencia”.

Asimismo, numerosas localidades navarras y también en Gallur -localidad natal del presunto asesino- realizaron ayer concentraciones silenciosas para mostrar el rechazo y la repulsa contra este crimen machista.

Primera víctima de 2022. Sara Pina, de 38 años, profesora, aficionada al teatro y con una “vida llena de proyectos”, es la primera mujer muerta a manos de su pareja o expareja en 2022.

Conmoción. Natural de Cortes, donde “era muy querida”, Sara Pina “estaba en el grupo de teatro y era muy amante del pueblo”, en el que residen sus padres y hermano.

Profesora. Sara trabajaba como profesora del colegio público Dos de Mayo de Castejón.