Un avión que cubría la ruta entre Bilbao y A Coruña ha tenido que aterrizar de emergencia este viernes por la mañana en el aeropuerto coruñés de Alvedro tras recibir una amenaza de bomba que ha resultado ser falsa.

La Ertzaintza recibió el aviso de bomba esta mañana en un mensaje anónimo a través de su aplicación, al que dio "muy poca credibilidad" pero, siguiendo el protocolo, dio traslado a la Guardia Civil.

El vuelo V73538, operado por la compañía Volotea, aterrizó este viernes a las 7.25 horas de la mañana en Alvedro con 105 personas a bordo y seis miembros de la tripulación.

Los pasajeros desembarcaron del avión y fueron aislados sin su equipaje de cabina para su control por los agentes, según ha informado la compañía aérea en su Twitter. Todos ellos se encontraban en perfecto estado.

La Guardia Civil registró la cabina y la bodega del avión, así como a los pasajeros y su equipaje sin que se hallaran evidencias de una bomba.

En el aeropuerto se desplegó un gran operativo policial siguiendo el protocolo en torno a la aeronave, que quedó en un estacionamiento alejado de las pistas.

El gran despliegue policial, incluidos los integrantes del departamento Tedax especializado en la desactivación de artefactos explosivos de la Guardia Civil, concluyó en torno a las diez de la mañana y se puso fin al plan de emergencia.

Investigación abierta

El jefe de la Comandancia de la Guardia Civil en A Coruña, el coronel Francisco Javier Jambrina, ha asegurado este viernes que se investigará, de forma coordinada con la Ertzaintza, la autoría de la falsa amenaza.

En declaraciones a los periodistas junto a la subdelegada del Gobierno en A Coruña, María Rivas, Jambrina ha detallado que "se van a hacer unas diligencias porque hay un delito de desórdenes públicos".