Al menos cuatro personas han muerto y más de 120.000 han tenido que ser evacuadas por las inundaciones provocadas por las lluvias torrenciales en la provincia china de Shanxi, en el norte del país, según las autoridades provinciales.

Los fallecidos son cuatro policías que se vieron sorprendidos por uno de los numerosos deslaves registrados, según el periódico estatal 'Global Times'. "La crecida del río Amarillo ha sido mayor este año", ha relatado una vecina de la zona al 'Global Times'. "Hay casas hundidas en las zonas rurales debido a las inundaciones, pero la gente ha podido ser evacuada previamente", ha explicado.

Más de 1,75 millones de personas han resultado directamente afectadas por las lluvias, hay más de 17.000 casas derrumbadas y unas 190.000 hectáreas de cultivos dañadas. Se han registrado deslaves de terreno en más de 70 distritos, según recoge la televisión china CGTN. Las autoridades han levantado ya 4.000 tiendas de campaña, 3.200 camas plegables, ropa y mantas para atender a la población afectada. Las autoridades provinciales han anunciado ya 50 millones de yuanes (casi 6,7 millones de euros) de desembolso.

Las intensas lluvias están dificultando las labores de rescate, más intensas si cabe ante la cercanía de las lluvias que hace tres meses dejaron más de 300 muertos en la provincia de Henan. Además, se ha paralizado debido a las lluvias la actividad en 87 minas de carbón, 372 minas de otros materiales y en 14 fábricas de químicos peligrosos que se encuentran en la región.