- El joven de Malasaña que denunció una agresión homófoba cambió ayer su de versión para reconocer a la Policía que dichas agresiones fueron consentidas. Desde el Ministerio se ha puesto en valor el trabajo de la Policía, ya que el joven que el domingo denunció una agresión en ese barrio de Madrid “ha decidido rectificar su declaración inicial y ha declarado que las lesiones inicialmente denuncias fueron consentidas”.

“Esta declaración se produce sin perjuicio del desarrollo de las investigaciones y del procedimiento judicial”, según apuntaron fuentes de Interior. Según adelantó la Sexta, el joven se derrumbó ante la Policía en un nuevo interrogatorio ayer a la tarde, en el que habría reconocido que esas laceraciones provocadas en el labio y en una nalga, en el que le tatuaron la palabra ‘maricón’, fueron consentidas dentro de una relación íntima.

La Policía ya sospechaba que los detalles de la denuncia que había realizado la supuesta víctima “no cuadraban”. Había afirmado que ocho jóvenes a plena luz del día, el domingo a las cinco de la tarde, le atacaron con sudaderas con capuchas y pasamontañas en pleno verano y nadie había oído nada. En las cámaras de seguridad de la calle Palma, en la que vive, y aledañas, además de las del Metro de Tribunal, no habían visto rastro alguno de un grupo tan numeroso de personas con esas vestimentas de invierno. Tampoco había llamado a los servicios de emergencias ni le había atendido ningún sanitario del Summa o del Samur-Protección Civil.

Los agentes habían interrogado estos días a comerciantes y vecinos de la zona y tampoco habían escuchado nada. Entonces, los agentes analizaron el móvil y las redes sociales del denunciante, y comprobaron que mantenía una relación con otra persona con elementos poco habituales. El denunciante aseguró en un primer momento que no conocía a los autores de su agresión. Este joven será previsiblemente acusado de una denuncia falsa.