El Gobierno vasco dará por concluidos el próximo 31 de agosto los trabajos de estabilización y adecuación del vertedero de Zaldibar, donde un desprendimiento causó la muerte de dos trabajadores el 6 de febrero de 2020.

Desde que el pasado 14 de mayo concluyeron las labores de búsqueda de Alberto Sololuze, cuyo cuerpo no ha sido hallado, han continuado las labores de estabilización, con obras en la parte inferior del vertedero sobre la que se cimienta la masa de residuos, según ha informado este viernes el Gobierno vasco.

Los trabajos han consistido en excavar un corte transversal a lo largo de la base sobre la que se apoya el vertedero e instalar un dique frontal adicional y un recrecido mediante espaldón con materiales de alta densidad.

Según el Gobierno vasco, estas actuaciones permiten asegurar que en la actualidad el terreno en el que se ubica el vertedero es estable y que lo seguirá siendo en el futuro. En los registros acumulados para las distintas áreas del vaso de vertido se ha podido asegurar que las obras realizadas han dado lugar a una estructura estable sin movimiento.

Para la estabilización del vertedero, se han utilizado desde mayo 132.000 metros cúbicos de material, de los cuales 42.000 pertenecen al dique y 90.000 al espaldón. Este movimiento de material ha supuesto como media el tránsito de 140-150 camiones al día.

También se han realizado obras para evitar la afección ambiental a las aguas, mediante la instalación de un sellado temporal con material arcilloso sobre el vaso de vertido, y se han instalado drenajes, tanto interiores (canalizados a la red de saneamiento comarcal), como exteriores (para evacuar las aguas pluviales a los canales laterales evitando su infiltración).

Así, el perfil de la superficie del vertedero tiene una forma con leves pendientes hacia al exterior que impiden la acumulación o infiltración de agua. En el futuro no se autorizará ninguna recepción de residuos en el vertedero, que se ceñirá a las labores de posclausura.