- El alcalde de Ezcaray, Gonzalo Abajo, reconoció ayer que el municipio vive con “impotencia y rabia” el incendio forestal iniciado el sábado, que se suma a otros ocurridos en la zona hace unos años. Abajo recordó que el fuego se detectó sobre las 13.15 horas del sábado, y poco después, a unos 300 metros al norte del primer foco, apareció un segundo punto de fuego.

Agradeció el trabajo que desarrollan incansablemente todos los equipos de extinción, entre los que figuran dos helicópteros y dos aviones, entre otros medios terrestres y personales, que no han parado en toda la noche para estabilizar el perímetro del incendio. El alcalde de Ezcaray confió en que se consiga controlar el fuego cuanto antes y que “todo quede en un susto”.

Esta turística localidad riojana cuenta con una población de 2.200 habitantes, pero actualmente hay unas 20.000 personas, ya que existen muchas urbanizaciones con segundas residencias, especialmente de habitantes en Euskadi. Aunque el núcleo urbano no ha corrido peligro en ningún momento, Abajo reconoció que ha habido “miedo” por si el fuego afectaba a las aldeas de Posadas y Azárrulla, muy próximas al incendio, pero el viento propagó el fuego monte hacia arriba.

Las piscinas municipales se desalojaron el sábado y aún no se podrán utilizar “por precaución”, por si los medios aéreos necesitasen hacer cargas de agua para extinguir el fuego. El monte junto a la zona de Posadas ha sufrido varios incendios, el último importante en el año 2017 y durante 2009 se detectaron otros cinco, alguno de estos provocado.