- El Gobierno Vasco afirmó ayer que comparte las conclusiones emitidas por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático (IPCC), que acoge “como un revulsivo para acelerar” su estrategia Basque Green Deal. En esta línea, urgió al impulso de la generación de energías renovables en todas sus modalidades, así como a la aceleración de la electrificación del transporte, y pidió a la ciudadanía “pasar a la acción sostenible” en sus hábitos cotidianos.

En un comunicado, desde el Departamento de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente explicaron que la advertencia de “cambios en el clima de la Tierra en todas las regiones y en el sistema climático en su conjunto” no ha sido acogida “con sorpresa” por el Gobierno Vasco y “la comunicación mundial de la primera entrega del Sexto Informe de Evaluación (IE6) del IPCC ha servido para oficializar las señales que se iban vislumbrando”. Por ello, el Ejecutivo de Euskadi asume esta notificación “como un revulsivo para acelerar las estrategias marcadas desde hace décadas y actualizadas en la presente legislatura 2020-2024”.

El Departamento de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente destacó que precisamente una de las novedades que aporta el Sexto Informe de Evaluación es la incorporación de un análisis más detallado del cambio climático a nivel regional, un enfoque que el Gobierno vasco acogió “gratamente”, teniendo en cuenta “la apuesta regional que lidera Euskadi para apoyar la adaptación local y el papel de los gobiernos autonómicos en la lucha contra el cambio climático”, entre otras, desde la presidencia de la red internacional de desarrollo sostenible Regions 4.

En esta necesidad de conocer el detalle regional e incluso municipal del estado de situación del cambio climático, el Gobierno Vasco ultima la versión actualizada del Informe Kosta Egoki y, según anunció, en septiembre se presentarán los escenarios climáticos más detallados realizados a nivel de Euskadi.

En todo caso, el Ejecutivo vasco destacó que Euskadi es “pionera” en el Estado español al disponer de “un visor de escenarios climáticos donde se puede ver toda la información actualizada y detallada en alta resolución”. Asimismo, apuntó que el informe del IPCC está en línea con los trabajos que actualmente se desarrollan en Euskadi respecto a escenarios climáticos, con la apuesta por una transición energética y las diferentes herramientas en curso para la adaptación al Cambio Climático.

Según indicó, el informe evidencia la necesidad de contar con “objetivos ambiciosos” respecto al cambio climático, “así recogidos en el documento base para la elaboración de la futura Ley vasca de Transición Energética y Cambio Climático, cuyo proyecto será aprobado a finales de este año 2021”. Euskadi ha reducido en los últimos quince años las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) en un 27% y el reto de la estrategia vasca hace suyo el objetivo de la UE de conseguir “una economía de cero emisiones netas de Gases de Efecto Invernadero en el horizonte 2050”.

El consumo energético es actualmente responsable de la mayor parte de las emisiones de gases de efecto invernadero, por lo que también “una gran parte de las soluciones a la crisis climática vienen de la mano de las actuaciones que en materia energética debemos desarrollar para afrontar el problema”, advirtieron desde el Ejecutivo. Por esta razón, urgieron al impulso de la generación de energías renovables en todas sus modalidades (fotovoltaico, eólico, biomasa, hidrógeno, etc) y dimensiones posibles (”desde parques eólicos con generación de alta capacidad hasta instalaciones de autoconsumo de pequeña dimensión”), así como a acelerar la electrificación del transporte.

Estrategia. El Ejecutivo vasco subrayó ayer que Euskadi busca un modelo de desarrollo “inclusivo y sostenible” con cuatro palancas de actuación con la tecnología y la industria como motor de cambio, entre ellas, una centrada en la transición energética con energías renovables en convivencia con el entorno y los recursos naturales. Una segunda palanca está dirigida a la movilidad sostenible. También se busca la implementación de procesos de producción industrial “cada vez más sostenibles y responsable con la gestión de los residuos”. Asimismo, Euskadi refuerza su apuesta por “una alimentación kilómetro 0 y de calidad”, con especial cuidado en el “despilfarro alimentario”.