- España encara el primer fin de semana de julio con un aumento preocupante y generalizado de rebrotes por covid-19 entre los jóvenes que amenazan la vuelta a la normalidad, lo que ha llevado a algunas autoridades sanitarias a ampliar los planes de vacunación, así como a ajustar las restricciones sobre todo en el ocio nocturno. Y es que los mayores índices de transmisión se concentran ahora en los grupos de edad de entre 20 y 29 años (366,7 casos) y de 12 a 19 (345,2), ambos en riesgo extremo de incidencia, al estar por encima de los 250 casos por 100.000 habitantes, lo que les convierte en los más vulnerables por no estar vacunados.

Ante este panorama, algunas comunidades como Cantabria, que con 945 casos por 100.000 habitantes lidera la incidencia de contagios entre la población joven de entre 20 y 30 años, ya han tomado cartas en el asunto aplicando nuevas restricciones al ocio nocturno. Precisamente ayer el Tribunal Superior de Justicia de Cantabria (TSJC) rechazaba la medida cautelar de suspensión del límite horario de cierre del ocio nocturno a las tres de la mañana que había pedido la Asociación de Hostelería.

Y ayer mismo, el Gobierno de Revilla decidía el cierre inmediato de los locales de ocio nocturno en los 16 municipios con nivel de riesgo medio por la cantidad de brotes activos vinculados a estos establecimientos. Estos municipios que están en nivel medio son Santander, Torrelavega, Castro Urdiales, Camargo, Piélagos, El Astillero, Santa Cruz de Bezana, Laredo, Santoña, Santa María de Cayón, Colindres, Marina de Cudeyo, Ribamontán al Mar, Bárcena de Cicero, Noja y Arnuero.

La Consejería de Sanidad había confirmado en los últimos días un “incremento exponencial” de casos vinculados “a múltiples celebraciones en discotecas, salas de fiestas y pubs, que continúan en domicilios”. De los 57 brotes activos en estos momentos, 17 están vinculados a establecimientos y actividades de ocio nocturno. Además, del total de 736 casos vinculados a esos brotes, el 61%, es decir, 450, tienen origen en esos locales.

Tras una valoración “exhaustiva” de los brotes, Sanidad destaca que “el único objetivo” de la medida es contener la expansión del virus, frenar la tendencia creciente en todos los indicadores epidemiológicos y reducir la incidencia. La Dirección General de Salud Pública constata que la mayoría de brotes de establecimientos de ocio nocturno superan la media de 6,7 casos por brote, alcanzando 180 casos el de mayor tamaño. Además, de los 3.457 contactos estudiados en estos brotes, 2.525 tienen vinculación directa con los locales, lo que “refleja el inusual y elevado número de personas expuestas en estos contextos”.

Pero no solo el ocio nocturno cántabro se ha visto afectado por la evolución de la pandemia. El rebrote de Mallorca ha obligado a retrasar su apertura en Pontevedra, mientras que en el resto de Galicia se ha reabierto, pero exige a los clientes sus datos para tener los contactos en caso de que se produzca algún positivo. También algunas discotecas y salas de fiesta de Catalunya han decidido cerrar temporalmente sus puertas al no poder garantizar las medidas anticovid, en un momento en el que los contagios están disparados.

Junto a estas medidas, las autoridades sanitarias tratan de acelerar la campaña de vacunación. De hecho, varias comunidades están inmunizando ya a los menores de 30 años y algunas, como Catalunya y Baleares, han ampliado la franja de edad para inyectar los sueros a partir de los 16 años. Canarias vacuna ya a los de 12.

En Cantabria. Estos son los 16 municipios donde se aplica desde ayer el cierre del ocio nocturno: Santander, Torrelavega, Castro Urdiales, Camargo, Piélagos, El Astillero, Santa Cruz de Bezana, Laredo, Santoña, Santa María de Cayón, Colindres, Marina de Cudeyo, Ribamontán al Mar, Bárcena de Cicero, Noja y Arnuero.

En Asturias. El ocio nocturno está abierto hasta las tres y los locales hosteleros continúan con su horario hasta la una y un máximo de seis personas por mesa en interior y diez en terraza. No se puede consumir en barra.

En Castilla y León. En cuanto al ocio nocturno o las peñas, las discotecas tendrán un aforo del 50% y los pubs, karaokes y similares del 75% e igual que en la hostelería el horario de cierre será el de las ordenanzas municipales.

En La Rioja. En hostelería y restauración, el aforo máximo en interiores es del 75 %, mientras que el cierre se establece según la licencia de cada local, como máximo hasta las 2.00 horas.