- Portugal registró ayer 1.496 nuevos casos de covid y una víctima mortal, una tendencia que, unida al avance de la variante delta del virus -considerada la más peligrosa-, amenaza la temporada de verano para el sector turístico, locomotora de la economía lusa. El informe de la Dirección General de Salud confirma que hoy se contabilizó el mayor número de casos en un domingo desde febrero, cuando el país se encontraba confinado por el avance de la pandemia.

La víctima mortal corresponde a la región Norte del país, aunque Lisboa y el Valle del Tajo continúan como la zona roja de la pandemia, con el 66% de los nuevos casos y predominio -en un 70%- de la variante delta.

El Gobierno mantiene las restricciones sobre la región -cordón perimetral del área metropolitana de Lisboa los fines de semana y cierre anticipado de restaurantes y establecimientos comerciales- y no descarta avanzar con nuevas medidas si se mantiene la tendencia en los próximos días. Los datos más recientes indican un leve descenso en el índice de transmisión en el país, que se sitúa en un 1,15, aunque la incidencia supera los 137 casos por cada 100.000 habitantes. En conjunto, con una población de 10 millones de habitantes, Portugal suma 874.547 positivos y 17.084 muertos desde el inicio de la pandemia. El avance de la enfermedad y el predominio de la variante delta están pasando factura a Portugal. Se ha quedado fuera de la lista verde británica y ha sido incluido en la llamada lista roja de Berlín, lo que implica que los visitantes de ambos países tendrán que guardar cuarentena a su regreso. La decisión de Londres -principal mercado del sector turístico luso- cayó como un jarro de agua fría sobre el Algarve, que todavía tenía esperanzas de recuperar a los ingleses.