- 2020 cerró con 870 muertos en accidentes de tráfico, un descenso del 21% respecto a 2019. Son los datos que ayer ofreció el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, que tienen en cuenta los muertos en las 24 primeras horas del siniestro.

Las restricciones a la movilidad hicieron posible ese notable descenso de la siniestralidad, en un año en el que se registraron en las carreteras interurbanas 797 accidentes mortales (un 21% menos que en 2019), y un descenso del 25% en los desplazamientos de largo recorrido, con 321 millones.

Y aunque por primera vez en 60 años las estadísticas recogieron menos de 1.000 fallecidos y hubo 59 días del año sin ningún muerto en las carreteras, el ministro no quiso hacer un balance “triunfalista” porque 870 muertes violentas y 3.463 heridos graves (un 22% menos) son unas cifras “inaceptables”.

“Sabemos que en su mayoría son evitables”, enfatizó Marlaska, como también lo hubieran sido los 125 fallecidos en turismo y furgoneta que no llevaban puesto el cinturón de seguridad, es decir, 1 de cada 4 muertos o el 26%, lo que supone 4 puntos por encima de 2019. Asimismo, algo más de 1 tercio (13 de 36) de los ciclistas que perdieron la vida el año asado no hacían uso del casco.

Por el contrario, en los motoristas aumentó el uso del cinturón. Solo 6 de los 189 muertos no lo llevaba, un 2% frente al 4% del año anterior. Esa cifra de motoristas fallecidos representa una reducción del 34% respecto a 2019. Mientras, el número de peatones muertos atropellados se redujo un 22% hasta los 92 y el de ciclistas un 10%.

En total, estos usuarios vulnerables que suman 317 fallecidos registraron un descenso del 29% y representan el 37% del total de víctimas mortales, 3 puntos por debajo del año anterior. En 2020, además, solo hubo 1 fallecido en accidente de autocar (el año pasado, ninguno).

El ministro hizo hincapié en que la movilidad se vio condicionada por la crisis sanitaria, con 106 millones de movimientos menos. Durante enero y febrero, antes de la declaración del estado de alarma, en una situación ordinaria “no lo empezamos bien”, ya que entre el 1 de enero y el 14 de marzo se incrementó el número de fallecidos en un 8% respecto al mismo periodo de 2019.

Sin embargo, desde el 15 de marzo al 20 de junio, cuando comenzó la desescalada, se produjo un “importante” descenso del 59% con 32 días en ese periodo sin fallecidos frente a 10 de 2019. Desde el 21 de junio hasta el 31 de diciembre, perdió la vida un 12% menos de personas que el año anterior.

Durante el primer estado de alarma, los camiones de más de 3.500 kilos fueron el único medio de transporte en que aumentó su siniestralidad (18 fallecidos frente a 11 en 2019), y pasaron de representar el 3% del total de fallecidos entre el 1 de enero y el 14 de marzo al 15% durante el estado de alarma.

Marlaska resaltó que la siniestralidad en autopistas y autovías se redujo un 34% hasta los 200 muertos, mientras que en carretera convencional lo hizo en un 16%, con 670 fallecidos. A pesar del descenso, este tipo de vía sigue siendo la más peligrosa y se registran (77% del total de los fallecidos).

Por tramos de edad, el menor descenso de fallecidos se dio entre los jóvenes de 15 a 24 años y en el de grupo de 55 a 64 años, con un descenso de 15% en ambos casos. Las mayores reducciones se registraron en los grupos de 45 a 54 años (-26%), 25 a 34 años (-23%), mayores de 64 años (-23%) y hasta los 14 años (han pasado de 19 a 7 fallecidos).

Uso del casco en ‘riders’. La Dirección General del Tráfico (DGT) estudia una reforma del Reglamento de Circulación para que, entre otras medidas, obligar a los repartidores conocidos como riders a usar casco.

El presidente de la Asociación de Víctimas de Accidentes DIA explicó que 2020 fue un año “muy atípico”, lo que hace que los datos de 2018 o 2019 no sean extrapolables.