- La población vasca era a fecha de 1 de enero de 2020 de 2.189.310 personas, 11.430 más que un año antes (+0,52%), un ascenso que ha sido posible gracias a la llegada de inmigrantes de origen extranjero ya que la comunidad autónoma registró más muertes que nacimientos. Según los dados publicados por el Instituto Nacional de Estadística, entre el 1 de enero de 2019 y el mismo día de 2020, el País Vasco tuvo un saldo migratorio con el exterior positivo en 17.813 personas, es decir que llegaron a Euskadi más foráneos que vascos se marcharon.

Hubo en cambio un saldo migratorio negativo con el resto de comunidades, de manera que fueron 178 más los vascos que dejaron Euskadi que los residentes en otras regiones que se mudaron al País Vasco. Al igual que en años anteriores también fue negativo el saldo vegetativo: murieron 6.152 personas más de las que nacieron.

En el Estado español la población aumentó en 392.921 personas (+0,84%) durante 2019 y se situó en 47.329.981. El saldo migratorio positivo de 451.391 personas compensó el saldo vegetativo negativo de 57.146. Durante 2019 la población creció en 14 comunidades y se redujo en las tres restantes. Los mayores incrementos en términos relativos se dieron en Baleares (1,9%), Madrid (1,59%) y Canarias (1,38%). En el otro extremo, se situaron Extremadura y Asturias (ambas con -0,34%) y Castilla y León (-0,27%). Todas las regiones tuvieron saldo migratorio positivo con el exterior, especialmente Madrid (93.128), Catalunya (90.918) y Valencia (57.220); mientras que La Rioja (2.499), Extremadura (2.529) y Cantabria (2.941) tuvieron los menores saldos. En los movimientos migratorios entre comunidades, las que más personas recibieron fueron Madrid (4.442), Valencia (3.363) y Baleares (1.837); mientras que Castilla y León (-2.945), Catalunya (-2.586) y Extremadura (-2.561) presentaron los saldos más negativos.

Las principales nacionalidades de los inmigrantes fueron la colombiana (con 76.524 llegadas a España), la marroquí (72.778) y la venezolana (57.700). Por su parte, las nacionalidades de emigrantes más numerosas fueron la rumana (35.618 salidas), la marroquí (18.628) y la británica (12.815).