- Tiempos de estancia máximos, control de accesos e incluso prohibición de tomar el sol son algunas de las normas que los que se acerquen a las playas vascas este fin de semana para disfrutar del buen tiempo tendrán que tener en cuenta como medidas para prevenir el contagio de la covid-19 en esta zonas, en las que ertzainas y policías municipales velarán por su cumplimiento. Aunque la temporada oficial de playa en Bizkaia comienza el 15 de junio y en Gipuzkoa el 1 de julio, las instituciones prevén que las altas temperaturas que se registrarán hoy y mañana provoquen una importante afluencia a los arenales de ambos territorios.

Cada municipio ha hecho públicas sus propias normas pero en todo los casos el denominador común pasa por hacer un uso responsable de la zonas de baño porque, tal y como ha recordó ayer el director de Salud Pública del Gobierno Vasco, Juanjo Aurrekoetxea, el coronavirus sigue latente y "todavía se pueden producir contagios". Con un llamamiento a la prudencia y a la responsabilidad el Ejecutivo autonómico subrayó la importancia de evitar aglomeraciones y apostó por el uso dinámico de las playas, para paseos, baños y actividades acuáticas, y por el uso de las mascarillas si no se pueden guardar los dos metros en los paseos. También advirtió de que de darse un contagio en un espacio público como es la playa el rastreo de contactos resultaría "imposible de abordar".

Precisamente, la imposibilidad de garantizar la distancia de dos metros durante la pleamar en la playa donostiarra de La Concha llevó al Ayuntamiento a prohibir que ayer los usuarios permanezcan en ella durante este periodo. En Hondarribia se ha acotado parte del aparcamiento, pero no se prevén excesivos problemas al tratarse de una playa grande.

En Bizkaia, el marco general establecido entre Diputación y ayuntamientos recomienda un máximo de tres horas de estancia, prohíbe el deporte y establece una nueva bandera, de color ámbar, que avisará de que la playa está bastante llena. También se recomienda no portar sombrillas, sillas y colchonetas salvo que sea estrictamente necesario, de manera que se ocupe menos espacio y pueda facilitarse la estancia a otros usuarios. Para regular la afluencia se va a usar un sistema que determinará tres niveles de ocupación que se corresponden con los colores de un semáforo: verde, ámbar y rojo.

En localidades como Bakio su Ayuntamiento ya ha advertido de que si se producen aglomeraciones el arenal se cerrará al público en general y solo tendrán acceso los surfistas hasta su apertura oficial, mientras que en llos arenales de Laga y Laida (en el municipio de Ibarrangelu),el de Ea, en La Arena (Muskiz), en el de Lekeitio, el de Plentzia y en el de Ondarroa, no se permitirá estar tumbado en la arena "de forma estática y continuada".

Por contra, el Ayuntamiento de Gorliz dejará tomar el sol en su playa, pero prohibirá la práctica de deportes de playa. El Ayuntamiento de Ondarroa impedirá los fines de semana, sólo durante las horas de marea alta, que la población pueda tomar el sol en la playa de Arrigorri y practicar deporte en la arena. El Ayuntamiento de Plentzia sólo autorizará el uso de la playa de este municipio vizcaíno para bañarse y pasear, por lo que el resto de actividades habituales como jugar, practicar deporte o tomar el sol estarán prohibidas. En Sopela se limitarán los aparcamientos y en Getxo se van a controlar los accesos para que no se supere el aforo determinado.