- Que China pospusiera su gran cumbre política anual, prevista para marzo, era una clara señal del tremendo impacto de la crisis del coronavirus. Ahora, con el brote aparentemente bajo control, Pekín anunció ayer que la celebrará a finales de mayo y la intención parece clara: escenificar la victoria sobre el virus. La reunión anual del máximo órgano legislativo chino, la Asamblea Nacional Popular (ANP) se celebrará finalmente a partir del 22 de mayo. Esta cumbre tenía inicialmente prevista su apertura para el pasado 5 de marzo, pero a finales de febrero las autoridades decidieron posponerla ante los riesgos que planteaba la entonces epidemia, ahora elevada al nivel de pandemia.