Vitoria. Los casos confirmados de coronavirus se elevan a 13 en Euskadi, con dos pacientes hospitalizados, y hay 211 personas en aislamiento domiciliario por haber tenido contacto con infectados, de los cuales un centenar son profesionales sanitarios.

En las últimas 24 horas el número de positivos se ha incrementado en tres: dos en Álava, donde ya hay diez, y el primero de Bizkaia. Gipuzkoa se mantiene con los dos casos ya conocidos.

La mesa interdepartamental del Gobierno Vasco presidida por el lehendakari, Iñigo Urkullu, se ha reunido este martes por segunda vez para estudiar la situación causada por esta epidemia, y ha decidido mantener las actuales medidas de prevención.

El director del Centro de Coordinación de Alertas y de Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad, Fernando Simón, ha explicado este martes que la Comunidad de Madrid y el País Vasco están valorando el cambio de escenario para pasar de una fase de contención a la de mitigación, en la que se adoptarían medidas adicionales, en concreto sería, en Torrejón de Ardoz y Vitoria, dos de las zonas que "más preocupan".

En el caso de Vitoria se estudiaría elevar el nivel de alerta al desconocerse el origen del primer positivo, lo que implicaría reducir la movilidad, controlar los eventos multitudinarios, restringir agrupaciones de personas e incluso cerrar escuelas.

No obstante, por el momento se mantendrán las medidas preventivas correspondientes a la fase de contención. Si se dieran más casos se pasaría a la fase de mitigación, pero "ese es un escenario que en este momento no está sobre la mesa", ha recalcado la consejera de Salud, Nekane Murga, que ha hecho un llamamiento a la tranquilidad.

De los 13 enfermos por Covid-19 en Euskadi 5 son personal sanitario. Este colectivo -considerado de riesgo por su alto grado de interrelación con enfermos- representa además la mitad de las personas que están aisladas en sus domicilios.

"Muchos" trabajan en la OSI de Álava, donde está el "foco" del virus en Euskadi, pero hay también profesionales de otros centros contagiados por su relación de "amistad" con los casos positivos.

Del centenar de sanitarios recluidos en su casa -la cuarentena es de 14 días y en algunos casos está a punto de terminar- algunos se han ofrecido a teletrabajar en cuestiones organizativas, dado que no tienen síntomas y se encuentran bien.

La consejera ha precisado que en las últimas horas se ha ingresado a dos pacientes con coronavirus que estaban con seguimiento domiciliario en Gipuzkoa y Álava.

Uno de los hospitalizados es un hombre que ha tenido un empeoramiento clínico y esta mañana se ha decidido trasladarlo para practicarle diversas pruebas, aunque su estado no es grave y podría volver a casa en la próximas horas.

El otro ingresado es una persona mayor, que había sido tratado por uno de los médicos que dio positivo. Tiene pluripatología, lo que supone un mayor riesgo que aconsejaba su hospitalización.

Sobre los tres nuevos contagios, Murga ha explicado que anoche se confirmó el primer positivo en Bizkaia: un hombre cuyo estado de salud es bueno y permanece en su domicilio desde donde se le hará seguimiento. Todo apunta a que el foco del contagio se produjo tras un viaje a Amberes (Bélgica).

Los dos nuevos infectados en Álava son un hombre y una mujer que ya estaban aislados en sus casas por ser contactos de los primeros positivos. El hombre es uno de los pacientes hospitalizados.

No hay novedad respecto a los dos casos registrados en Gipuzkoa: siguen en buen estado y bajo seguimiento de Salud Pública y Osakidetza.

Murga ha informado de la próxima incorporación de 12 médicos al equipo de vigilancia epidemiológica para reforzar este servicio, en el que actualmente trabajan 25 personas. Se hará mediante una bolsa de trabajo abierta por IVAP que no requiere de examen previo de acceso.

Ha reconocido que los contagios entre el personal médico han supuesto una merma en los centros sanitarios, especialmente en los hospitales alaveses de Txagorritxu y Santiago y en el centro vitoriano de Olarizu.

Ha asegurado en todo caso que la atención está garantizada gracias a un esfuerzo organizativo y al refuerzo de médicos llegados de los otros dos territorios.

Murga ha defendido la actuación de los responsables de Txagorritxu y de las autoridades sanitarias tras el primer positivo: una médico que había viajado a una zona que no considerada de riesgo que trabajó durante cinco días con síntomas leves.

Cuando el cuadro se agravó con fiebre solicitó que se le practicara la prueba correspondiente. El resultado se supo el viernes 26 a las 19.00 horas "y a las 19.10 ha había un comité de crisis y se empezó a identificar a sus contactos", ha relatado la consejera.

Ha explicado también que este domingo se dieron instrucciones para extremar las precauciones con los profesionales sanitarios por ser un colectivo de riesgo, como también lo son los mayores que viven en residencias debido a su edad y a que viven en contacto con más personas.