- El portavoz de ERC en el Congreso de los Diputados, Gabriel Rufián, incendió ayer la relación de su partido con su socio en el Govern, JxCat, al criticar los supuestos contactos de Carles Puigdemont con Vladímir Putin. El diputado aseguró en una rueda de prensa, en referencia a Junts, que son “señoritos” que “durante un rato se creían James Bond”.

Numerosos dirigentes de la formación posconvergente salieron a degüello y el secretario general de JxCat, Jordi Sànchez, calificó a Rufián de “miserable” y de “portavoz oficial de las cloacas del Estado”, un calificativo con el que coincidió la portavoz de su partido en la Cámara Baja, Miriam Nogueras.

Fue el diario The New York Times el que publicó el pasado mes de septiembre un reportaje que señalaba que el jefe de la oficina de Puigdemont, Josep Lluís Alay, exploró el apoyo de Rusia al procés y se reunió en Moscú con funcionarios rusos, exagentes de inteligencia y el nieto de un espía de la KGB.

A las críticas contra Rufián se sumó el vicepresident y conseller de Políticas Digitales y Territorio, Jordi Puigneró, que trasladó al president de la Generalitat, Pere Aragonès, su “enfado” por sus declaraciones. “¿Se puede ser más ignorante? En todo caso es imposible ser más miserable. Y es indiscutible que quien habla así se convierte en portavoz oficial de las cloacas del Estado y la burbuja de la derecha mediática”, aseveró.