La Ertzaintza liderará la primera respuesta policial cuando se produzca un ataque terrorista en Euskadi, al igual que lo harán los Mossos de d'Esquadra en Catalunya, según aclara el nuevo plan de prevención, protección y respuesta antiterrorista, que revisa los procedimientos para lograr detenciones cuanto antes y evitar posibles "disfunciones" en la coordinación.

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha presentado este lunes este plan que actualiza el antiterrorista de 2005, revisado en 2009 y 2015, e incorpora las directrices de la Estrategia contra el terrorismo de la UE de 2017 y de la Estrategia Nacional de 2019.

Antes de dar cuenta a los medios de comunicación de las novedades del plan, Marlaska ha trasladado su contenido a los responsables de las fuerzas y cuerpos de seguridad en materia de terrorismo y a los grupos parlamentarios, si bien no han acudido a la cita en Interior diputados de Vox, ERC ni EH Bildu.

Unas ausencias sobre las que el ministro ha eludido pronunciarse, si bien ha apelado a la unidad política y social y a la implicación de todas las administraciones para hacer frente al terrorismo.

Entre las novedades del nuevo plan, Marlaska ha destacado que las policías autonómicas, "como seguridad" que son en su ámbito territorial, asumirán la respuesta policial en los primeros momentos tras un ataque terrorista en sus comunidades.

"La respuesta ante un ataque la dirige el operativo policial competente en el territorio", ha dejado claro el titular de Interior, lo que no significa que el resto de cuerpos policiales no participen en la investigación o la autoridad judicial decida con posterioridad qué cuerpo debe asumirla.

Se trata, ha añadido, Marlaska, de "atar la coordinación entre todos los cuerpos y fuerzas de seguridad, protección civil y también la oficina de atención a víctimas "para volver a la normalidad en el menor tiempo posible".

SE MANTIENEN LOS CINCO NIVELES DE ALERTA ANTITERRORISTA

La nueva realidad de lucha contra el terrorismo, con la amenaza de la radicalización en redes sociales, los lobos solitarios o las células autónomas, aconsejaba revisar los anteriores planes antiterroristas para orientarlos de manera más eficiente a la detección y anticipación, así como para articular una respuesta coordinada y eficaz en los casos de atentados.

Ahora bien, el plan mantiene los cinco actuales niveles de riesgo -entre el riesgo bajo y el muy alto del nivel cinco-, por la inminencia de un ataque terrorista o la comisión efectiva del mismo.

Desde junio de 2015, el Estado español se mantiene en el nivel 4, y el ministro ha dejado claro que cualquier cambio o refuerzo de medidas de esta alerta es decisión de los expertos de la mesa de valoración, en la que participan responsables de la lucha antiterrorista que se reúnen periódicamente.

Lo que articula el plan es "una nueva respuesta operativa coordinada, integral y proporcionada" mediante el refuerzo de la coordinación policial y con otros centros sectoriales y entidades con competencias en seguridad.

REUNIÓN URGENTE DE LA MESA DE COORDINACIÓN, TRAS UN ATENTADO

El plan prevé que, en los supuestos de atentado terrorista en el Estado español, o en el extranjero si son contra personas o intereses nacionales, se reunirán de inmediato la Mesa de Coordinación y la Mesa de Evaluación de la Amenaza, un órgano ya existente.

La principal novedad es que esta Mesa de Coordinación tendrá un carácter reforzado en caso de ataque, en la que estarán representados la Secretaría de Estado de Seguridad y su Dirección General de Coordinación; Policía Nacional, Guardia Civil, Ertzaintza, Mossos d'Esquadra, CITCO, Centro de Protección de Infraestructuras Críticas y de la Oficina de Coordinación de Ciberseguridad.

También en esta mesa que Interior convocará de forma urgente tras un ataque terrorista participarán la Dirección General de Protección Civil y Emergencias, la de Relaciones Internacionales y Extranjería y la de Apoyo a las Víctimas del Terrorismo.

El objetivo de esta mesa será coordinar la ejecución y el desarrollo de los planes de respuesta sectorial antiterrorista, movilizar los recursos de cada cuerpo policial o institución participante en el plan y activar los servicios de asistencia a las posibles víctimas e identificación de las personas afectadas.

Según ha detallado el ministro, el plan dedica especiales esfuerzos a preservar objetivos sensibles en ámbitos como las instalaciones, redes, sistemas y equipos físicos y de tecnología de la información sobre los que descansa el funcionamiento de los servicios esenciales, así como los centros y organismos públicos u oficiales, cuya destrucción, ataque o degradación suponga un daño importante.

CREACIÓN DE UN CENTRO DE GESTION DE CRISIS TERRITORIAL

Se constituirá un Centro de Gestión de Crisis Territorial hasta que se produzca la localización y detención de los autores y la reducción del riesgo provocado por la acción terrorista.

Estos centros territoriales garantizarán la actuación conjunta, cohesionada y coordinada de la respuesta de las fuerzas y cuerpos de seguridad, los servicios de protección civil y las entidades asistenciales, en colaboración siempre con la administración autonómica y local correspondiente.

En estos centros territoriales se integrará también la Dirección de Apoyo a Víctimas del Terrorismo para garantizar la asistencia integral a las víctimas.