- La gestión de la pandemia no causa desgaste entre los socios al frente del Ejecutivo de Iñigo Urkullu en tanto que PNV y PSE volverían a reeditar su mayoría absoluta con exactamente los mismos escaños que obtuvieron en los últimos comicios al Parlamento Vasco. Así lo recoge la muestra del último Sociómetro, que refleja asimismo cómo EH Bildu (23 actas) le come el terreno a Elkarrekin Podemos y protagoniza la mayor subida del arco político al arrebatarle dos escaños y profundizar en la sangría de la formación morada. PP y Vox salvarían su actual representación dentro de una fotografía que no alteraría la correlación de bloques bajo el liderazgo de los jeltzales, que obtendrían 31 escaños, con ocho de ventaja sobre la coalición soberanista en el conjunto de la CAV y siendo la primera fuerza en los tres herrialdes. El sondeo se realizó justo los días en que se conoció que Bildu, por vez primera, facilitaría la aprobación de los Presupuestos al no presentar una enmienda a la totalidad.

Por territorios, el PNV mantendría su incontestable dominio en Bizkaia y amarraría sus 12 asientos, con un 43,6% de los votos, seguido de EH Bildu (6 escaños y el 23,8% de las papeletas) y de los socialistas, que repetirían sus 3 parlamentarios (13,7%). Podemos aguanta en este feudo sus 2 escaños (6,9%), al igual que el PP (7%).

El codo a codo entre las dos fuerzas soberanistas en Gipuzkoa se resuelve en favor de los nacionalistas, puesto que los jeltzales conseguirían 10 asientos con un 36,1% de los sufragios, mientras que Bildu sacaría el mismo número de representantes pero con un 35% de apoyos. El PSE se quedaría la tercera plaza con 3 escaños y un 13,5% de los votos y Podemos cedería una de sus actas al no pasar del 6,7% de respaldo. El PP reeditaría su único escaño con el 4,2% de papeletas.

Por su parte, el PNV vencería con suficiencia en Araba, con sus actuales 9 escaños y el 32,6% de los sufragios, al tiempo que Bildu ganaría terreno al sumar un asiento y auparse hasta los 7 con el 24% de aval en las urnas. Los socialistas volverían a firmar 4 representantes (16,5%), por delante del PP, con el 11,7% de votos y 3 actas. Los morados sufrirían también aquí un castigo perdiendo uno de sus dos escaños, con el 6,1% de votos, al tiempo que Vox sostendría su parcela y su exigua presencia en la Cámara gracias al 4,6% de adhesiones.

En este escenario, PNV y PSE tendrían alfombra roja para proseguir con su actual fórmula de Gobierno, aunque los números darían igualmente para una suma de fuerzas en el campo soberanista -que sería el espectro más reforzado- y para el tripartito de izquierdas entre socialistas, Bildu y Elkarrekin Podemos-IU. Sin embargo, ni por las pautas de conducta ni por las manifestaciones desde sus respectivas filas, todo lo que no fuera prolongar la coalición de gobierno presente sería toda una sorpresa. Lo que resulta evidente es que la formación morada no es capaz de remontar el vuelo sino todo lo contrario pese a que emprendió una estrategia pública de ser útil y escapar de la confrontación, algo que no se ha constatado en la negociación presupuestaria y que puede acabar pasándole factura.

Otro de los aspectos que sobresalen es el aumento de participación entre el electorado. Si el 12 de julio de 2020, en el contexto de la pandemia, se produjo una abstención del 49,2%; el Sociómetro del Ejecutivo vasco calcula que en esta ocasión sería del 44,5% del censo en Bizkaia (hace año y medio se elevó al 49,6%); en Gipuzkoa se situaría en el 44% (fue del 47,8% en 2020) y en Araba, del 45,5% frente al 51% que hubo en la cita electoral de aquel verano.

Este estudio se ha elaborado tras efectuar 3.333 entrevistas telefónicas entre el 29 de noviembre y el 3 de diciembre. La encuesta no contempla la actual coalición PP+C’s dado que estos dos partidos no han anunciado si volverán a presentarse juntos en los próximos comicios, de forma que los votos de Ciudadanos figuran en el apartado de Otros, que no lograría representación.

La Comisión de Hacienda y Presupuestos del Parlamento Vasco aprobó ayer 11 enmiendas acordadas por PNV y PSE con EH Bildu, y rechazó las más de 1.600 enmiendas parciales registradas por Elkarrekin Podemos-IU y PP+C’s al proyecto de Presupuestos, que culminará su recorrido parlamentario con el debate y la votación definitiva en pleno, prevista para el 23 de diciembre. El acuerdo con la coalición soberanista contempla modificaciones por valor de 36 millones de euros. El montante global del pacto presupuestario asciende a 253 millones de euros, si bien los 217 millones de euros restantes se materializarán a través de otras fórmulas, dada la complejidad que tiene la incorporación de determinadas medidas a las Cuentas por la vía de enmiendas.

De esta forma, se aprobaron seis enmiendas transadas entre PNV, PSE y EH Bildu, a través de las que se incrementan en seis millones de euros las partidas destinadas a las Ayudas de Emergencia Social y a políticas de juventud. Las cinco enmiendas más de la coalición soberanista respaldadas desde el Ejecutivo de Iñigo Urkullu recogen medidas por importe de 30 millones de euros para reforzar Osakidetza. Desde la Comisión se rechazaron las 197 enmiendas parciales registradas por Elkarrekin Podemos-IU y las cerca de 1.500 presentadas por PP+C’s.