- A apenas cinco días de que arranque la 40º edición del Congreso Federal del PSOE, la cita del fin de semana próximo en la Fira de Valencia con la que Pedro Sánchez aspira a relanzar a sus siglas de cara al próximo ciclo electoral que arrancará en 2023, los socialistas se enredan por el modelo territorial que quieren impulsar para el Estado español. Consolidar definitivamente los contrapesos del andamiaje institucional no estará exento de disputas. Cuestiones como la plurinacionalidad, la cogobernanza, la federalidad o el encaje “multinivel” de las autonomías estarán sobre la mesa. De hecho, ayer ya se supo que el PSOE-A, el PSG o el PSPV, las sucursales de Ferraz en Andalucía, Galicia o la Comunitat Valenciana, alzarán la voz para que estas cuestiones tengan cabida en el cónclave.

Bajo el foco de todas estas cuestiones está Catalunya, sobre todo por la mesa de negociación abierta entre Gobierno y Generalitat; y la Comunidad Autónoma Vasca y Navarra, aunque en menor medida, por su carácter foral. Y saldrán a relucir en el transcurso de los debates de su ponencia política. El PSOE andaluz ya ha advertido que solicitará igualdad de derechos entre todas las comunidades autónomas y reclamarán que la profundización del autogobierno catalán que pueda llegar no genere “agravios comparativos” ni “más derechos políticos y económicos respecto a otras autonomías”. Algunas son enmiendas que ya han pasado todos los filtros previos para poder ser debatidas en el Congreso federal y que si reciben el 20% de avales pasarán directamente al plenario. Si existiera el respaldo suficiente se trasladarían a la ponencia política y se incluirían en la hoja de ruta de cara al futuro más cercano de la formación socialista.

Estas reclamaciones por parte de la federación andaluza tratan de modificar la ponencia de la dirección de Ferraz, en la que se apela a la situación catalana. “La España multinivel moderna es la que ofrece cauces democráticos de diálogo y pacto en el marco de la ley para dar salidas a situaciones como la de Catalunya, en clave de mayor profundización del Estado de las autonomías”, según reza el texto en concreto. “El mejor encaje del autogobierno catalán con el resto de España constituyen objetivos de primer orden para los y las socialistas”, dicta otro de sus párrafos. Pero pese a llamar a aplicar la ley, esta redacción parece haber soliviantado al PSOE de Andalucía, que históricamente ha sido su principal bastión. Aún así, las bases andaluzas reclaman que cualquier paso a dar se debe guiar bajo una “apuesta firme” por “no generar agravios comparativos en materia de financiación que ahonde el surco ya abierto” entre Catalunya, Navarra y el País Vasco “con el resto de los territorios del Estado”. Incluso, llaman “insolidarias” a esas comunidades, ya que “los temas económicos son los importantes para esas comunidades ricas”.

En otra enmienda proveniente de Andalucía, se reclama que “el fortalecimiento del proyecto de España” se sustente, entre otras cosas, en “la sensibilidad hacia sentimientos de pertenencia diversos”. Y esa situación se daría con “el reconocimiento de las diferentes sensibilidades nacionales dentro de España”. Sobre la mesa en el Congreso Federal de Valencia también estará otra puntualización a la ponencia política referente a “las desigualdades dentro del territorio nacional, sobre todo en el sur y en el norte”. Otra apreciación también apela a que el mayor encaje de Catalunya se debe dar sin que eso produzca “más derechos políticos y económicos respecto a otras autonomías”. Y una última defiende que el PSOE debería de dotarse de herramientas que eviten “los errores que se cometieron en el pasado en la conformación de la estructura territorial vigente”.

En cuanto a los conceptos de plurinacionalidad a la que aspira el PSOE, que la totalidad de federaciones defienden a capa y espada, otra enmienda apunta a “distinguir la nación del Estado, y entender que el necesario reconocimiento y elevación a la categoría de nación a un territorio no ha de venir automáticamente acompañado de una capacidad competencial mayor al resto de las comunidades autónomas”. Otro de los conceptos estrella que revoloteará en el 40 Congreso federal será el de “España multinivel”.

También se plantean otro tipo de modificaciones a la ponencia políticas, provenientes sobre todo de las nacionalidades históricas. Es el caso de una de Galicia en la que se insta a que “la España plurinacional moderna debe buscar cauces de diálogo para ofrecer un encaje adecuado a las nacionalidades históricas de Galicia, Euskadi y Catalunya, fomentando el diálogo, la sensibilidad y la cooperación”. En cuanto al PSC, en esta ocasión no trasladarán su posicionamiento a favor de posiciones rupturistas, pero sí mantiene inalterables las resoluciones que se aprobaron en ese 39º Congreso Federal. Entre ellas se incluyó “una reforma constitucional federal, manteniendo que la soberanía reside en el conjunto del pueblo español” para “perfeccionar el reconocimiento del carácter plurinacional del Estado apuntado en el artículo 2 de la Constitución”. También el PSPV reclama una España “policéntrica”, u otra referente a lograr “más autonomía, más autogobierno”.

En cuanto al PSE, y pese a que no se conocen las enmiendas que podría presentar para el desarrollo territorial, todo hace indicar que volverán a apostar por la plurinacionalidad bajo el imperio de la ley y sin posiciones rupturistas. Con un congreso propio en ciernes tan solo un mes después del estatal -21 y 22 de noviembre-, Mendia ha marcado el rumbo para la formación: “queremos ser la garantía de que Euskadi no siga la senda de Catalunya”.

Homenaje a Rubalcaba. La alcaldesa de París y candidata a la Presidencia de Francia, Anne Hidalgo, asistirá el viernes al Congreso del PSOE en Valencia, que rendirá homenaje al que fuera secretario general del partido y vicepresidente del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, fallecido en 2019. Hidalgo participará en la charla Avanzamos en transición ecológica justa. El viernes también intervendrán el secretario general de CCOO, Unai Sordo; el de UGT, Pepe Álvarez; y los expresidentes José Luis Rodríguez Zapatero y Felipe González. El homenaje a Rubalcaba será el domingo antes de la proclamación de la elección de los nuevos órganos federales y de la intervención de Pedro Sánchez.