- El rey Juan Carlos se plantea viajar a España en las próximas semanas, antes de que finalice este año, una vez que la Fiscalía del Tribunal Supremo parece inclinarse por archivar las tres investigaciones abiertas sobre sus fondos en el extranjero desde hace más de un año al no observar indicios de delito.

Juan Carlos I ha trasladado esta posibilidad a alguno de sus más cercanos allegados, aunque sin concretar si sería un regreso definitivo o eventual de Abu Dabi (Emiratos Árabes Unidos), ni dónde se alojaría, han informado fuentes de su entorno.

Una vez que ha trascendido que la Fiscalía podría no prorrogar sus indagaciones, el rey emérito “cree que ya puede volver”, después de que no fructificaran los intentos que hizo antes al poder comprometer a su hijo, Felipe VI. Don Juan Carlos baraja venir a España antes de las Navidades, “incluso en noviembre”, apuntan las fuentes. Los fiscales se inclinan por archivar su caso debido a la inviolabilidad que le protegía durante el periodo que reinó, lo que le eximiría de responsabilidad en las comisiones que pudo cobrar de Arabia Saudí por las obras del AVE a La Meca.

Las dos regularizaciones tributarias que acometió por valor de 5,3 millones de euros por el dinero donado por amigos para sus gastos personales también cierran la puerta a un posible delito, al tiempo que no se ha podido demostrar que ocultara fondos en paraísos fiscales.

Don Juan Carlos emprendió rumbo a Abu Dabi el 3 de agosto de 2020 después de que la Casa Real, con el visto bueno del Gobierno, acordara que lo mejor era su salida temporal de España a la espera del resultado de las diligencias fiscales.

Felipe VI dejó en manos de su padre la elección del destino en el extranjero. En un primer momento, sopesó la opción de instalarse en Portugal, pero ante las reticencias del Palacio de la Zarzuela por la proximidad con España, decidió trasladarse al emirato invitado por las autoridades del país del Golfo Pérsico.

“Aquí no molesto a la corona”, justificó don Juan Carlos, según su testimonio recogido en el libro publicado esta semana, Mi rey destronado, obra de la escritora francesa Laurence Debray, quien le visitó en Abu Dabi en primavera.

Está por desvelar dónde fijaría su domicilio una vez que dé por cerrada su expatriación, al considerarse improbable su vuelta al Palacio de la Zarzuela, que fue su residencia durante más de 57 años.

Algunas informaciones indican que el Gobierno estaría estudiando la posibilidad de alojarlo en alguna propiedad de Patrimonio Nacional por haber sido jefe de Estado y conservar el título de rey de manera vitalicia.

El entorno de Juan Carlos I no descarta que pudiera ir a Portugal, “donde tiene muchos amigos y es muy querido”, señalan las fuentes. Desde el país vecino podría desplazarse fácilmente a Sanxenso (Pontevedra), uno de sus destinos favoritos. Tampoco se descarta que se aloje con su hija mayor, la infanta Elena, en su piso de Madrid.