- El PP continúa con su oposición feroz contra el Ejecutivo de Pedro Sánchez mediante su estrategia de criticar todos los movimientos del Gobierno español. Al igual que lo hiciera con la gestión del covid-19, los indultos a los presos del procés o incluso con las palabras de Alberto Garzón sobre la reducción del consumo de carne, la formación conservadora arremetió ayer, además de contra la nueva subida de la luz, contra el borrador de la nueva ley educativa que, textualmente, promueve la “igualdad de género, el consumo responsable, el desarrollo sostenible y la educación para la salud, incluida la afectivo-sexual”.

El vicesecretario de comunicación del PP, Pablo Montesinos, criticó la “deriva radical” de La Moncloa y advirtió de que, si Sánchez no rectifica, iniciarán una “batalla legal” en defensa de la “libertad educativa”, después de considerar que este borrador de ley deja de lado “los elementos más básicos de la educación”. Por ello, insistió en la necesidad de negociar, consensuar y llegar a un pacto de Estado en materia educativa, antes de advertir al Ejecutivo español de que, en caso de no dar un paso atrás, la derogación de esta ley será una de las primeras decisiones que tome el líder del PP, Pablo Casado, cuando llegue al poder.

Estrategia que puede llevar a contradicciones. Es lo que suscitaron ayer las palabras de Casado cuando, después de criticar la subida del precio de la luz, aseguró que cuando su formación llegue al Gobierno, realizará una ley “para que los consumidores paguen solamente por la energía consumida”, una medida a la que se opuso el PP cuando gobernaba. El máximo dirigente popular recordó que “el precio de la luz es el triple que hace un año” marcando así un “máximo histórico en plena ola de calor”. Sin embargo, lamentó que Sánchez haya rechazado la propuesta del PP. “Están dejando a demasiada gente atrás”, zanjó Casado en su cuenta oficial de Twitter.

En este sentido, Montesinos reivindicó la oposición “firme”, pero “responsable” de su partido ante un Gobierno “sin medidas” para paliar la subida de la luz. “Es nuestra obligación denunciar a este Ejecutivo que pone la política del retrovisor porque no tiene medidas para aplacar la escandalosa subida de la luz”, señaló. El portavoz del PP aseguró que la ciudadanía respalda su modo de hacer oposición tal como sostienen las encuestas. “Si hoy hubiera elecciones generales, Pablo Casado sería presidente del Gobierno”, aseguró. Los populares denuncian que las encuestas preelectorales elaboradas por el CIS favorecen sistemáticamente al PSOE, ya que, el presidente de la institución, Félix Tezanos se ha declarado abiertamente socialista en numerosas ocasiones y fue militante de esta formación. El pasado lunes el PP se hizo eco de un sondeo de Okdiario en el que la formación conservadora lideraba ampliamente la intención de voto en el Estado español.

En este contexto, Sánchez se mantuvo ayer al margen de las críticas por parte de la oposición y se mostró optimista de cara a la “recuperación económica y social” en su reaparición pública en Lanzarote, donde disfruta de su descanso vacacional, en un acto sobre el escritor portugués y premio Nobel de Literatura, José Saramago (1922-2010), en el que también estuvo presente el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero.

Sánchez esquivó las críticas recibidas por el PP y evitó hablar sobre uno de los temas más candentes de la actualidad informativa, la subida del precio de la luz. El presidente del Ejecutivo español mencionó el informe de la ONU sobre el cambio climático y aseguró que la protección del medio ambiente “debe ser una prioridad absoluta”. Tampoco hizo referencia a la anunciada ampliación del aeropuerto de Barcelona-El Prat, duramente criticada por las organizaciones ecologistas y por sus propios socios de Gobierno, Unidas Podemos, con quien ha visto agrandadas sus diferencias. Por último, Sánchez reprodujo una frase del escritor Saramago: “Las energías vuelven siempre cuando la esperanza vuelve”.

De carácter “blando”. El diputado socialista por Gipuzkoa y secretario de Transparencia y Democracia Participativa del PSOE, Odón Elorza, acusó ayer al PP de practicar “un golpe de estado blando” al impedir la renovación de los órganos constitucionales. Elorza responsabilizó al Partido Popular, a través de las redes sociales, de la situación de interinidad en la que se encuentran órganos tan importantes como el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), el Tribunal de Cuentas, el Defensor del Pueblo y no se hayan cubierto vacantes del Tribunal Constitucional. En palabras del dirigente socialista, acostumbrado a expresar siempre lo que piensa; al negarse a negociar la renovación de los órganos constitucionales, el partido presidido por Pablo Casado “practica un golpe de estado blando contra la democracia”, que enmarca en su “acoso al Gobierno” de Pedro Sánchez, y que se viene multiplicando en las últimas semanas.

“Cuando gobernemos haremos una ley para que el consumidor pague solo por la energía consumida”

Presidente del PP

“La protección del medio ambiente y el cambio climático deben ser una prioridad absoluta”

Presidente del Gobierno español