- La colección de obras de arte valorada en más de 15 millones de euros en la que destacan autores como Eduardo Chillida, Miquel Barceló o Antoni Tàpies, que fueron conseguidas por el empresario David Marjaliza presuntamente mediante dinero ilícito dentro del marco de la Púnica, están a punto de ser devueltas desde Suiza al Estado español. La Audiencia Nacional solicitó al país helvético una comisión rogatoria, con el visto bueno del propio Marjaliza, socio del exdirigente del PP de Madrid Francisco Granados, para que estos objetos embargados, que actualmente se encuentran en Ginebra (Suiza), sean puestos a disposición de la Justicia española.

El juez García Castellón explica que adopta esta decisión a raíz del informe del Ministerio Fiscal de abril de 2021, en el que le solicitaban promover el auxilio judicial internacional “para solicitar formalmente la entrega a las autoridades judiciales españolas de todas las obras de arte y la colección de plumas estilográficas incautadas al investigado”. Estos objetos embargados fueron presuntamente obtenidos mediante dinero extraído de los “negocios de corrupción” del empresario de la construcción.

Uno de los últimos escollos para la repatriación de estas obras de arte fue la declaración del propio Marjaliza -que lleva colaborando con la justicia desde su detención en 2014- en una comparecencia judicial ante una fiscala suiza el pasado 29 de junio. En ella, el empresario autorizó la incautación de estos objetos por parte de la Justicia española, así como que los gastos que derivan del transporte y el seguro civil para que los objetos lleguen hasta territorio español se financien mediante sus cuentas bancarias en Suiza. David Marjaliza ya había autorizado la subasta de parte del patrimonio (relojes de lujo, joyas y vehículos) que le embargó la justicia, para cubrir la previsiblemente millonaria sanción que se le impondrá por su participación en la trama de corrupción.

La colección del que fuera uno de los cabecillas de la trama Púnica, está valorada en 15,6 millones de euros y está compuesta por 18 obras de arte, cinco fotografías, cuatro esculturas y hasta 185 plumas estilográficas Montblanc. Entre los autores que coleccionó Marjaliza, se encuentran Eduardo Chillida, Miquel Barceló, Antoni Tàpies, Manolo Valdés, Juan Uslé, Torres García o el Grupo Crónica.

Aquellas obras de arte, presuntamente conseguidas mediante los “negocios de corrupción” del constructor, se depositaron bajo sus órdenes en un almacén a nombre de una sociedad radicada en Singapur, al frente de la cual Marjaliza situó a una persona de nacionalidad tailandesa y a otra de nacionalidad singapurense, explica el auto del juez. “El investigado se sirvió de la previa firma de un trust y un contrato de fideicomiso, a los efectos de taparse como beneficiario efectivo de las obras y plumas de colección”, subrayó.

Esa pantalla era la que impedía que las autoridades suizas autorizasen la repatriación de las obras de arte, ya que le ocultaban como propietario real de los objetos almacenados en el depósito franco de Ginebra. Pero el juez apunta ahora que gracias a la cooperación con la justicia de Singapur se ha podido conocer que la sociedad Millenia Trading fue realmente creada en beneficio de Marjaliza.

Hace más de seis años, el 4 de marzo de 2015, el primer juez que se encargó de la investigación, Eloy Velasco, acordó el embargo de estos objetos. En junio de ese mismo año, Marjaliza se mostró arrepentido por su implicación en la tramaPúnica, meses después de ser detenido junto a Francisco Granados en 2014. El empresario aceptó entonces la repatriación de su colección en Suiza, y lo ha vuelto a hacer recientemente ante el juez de la Audiencia Nacional.

A finales del mes pasado, el magistrado García Castellón concluyó la instrucción de cuatro de las nueve piezas que quedaban abiertas en la Púnica, aunque acordó seguir indagando al menos tres meses más en la presunta financiación irregular del PP de Madrid, donde están imputados, además de Granados, los expresidentes regionales Esperanza Aguirre e Ignacio González.