- Será una de las instantáneas más buscadas desde 2017, el reencuentro entre Carles Puigdemont y Oriol Junqueras, que hoy se verán en persona en Waterloo después de un vía crucis respectivo donde ha aflorado más de un desencuentro y crítica cruzada. Sin embargo, el líder de ERC señala que “no hace falta ninguna reconciliación” ya que él “siempre” ha mostrado “voluntad” de entendimiento. “Siempre es un placer” reencontrarse con él, “una oportunidad más de hablar y de compartir visiones sobre el presente y el futuro”, sostuvo ayer Junqueras a su llegada a la sede del Parlamento Europeo en Estrasburgo, donde mantuvo reuniones con el grupo Verdes/ALE, al que pertenecen los diputados de Esquerra. Junto a él se desplazaron el conseller Raül Romeva, la expresidenta del Parlament Carme Forcadell y las exconselleras Dolors Bassa y Meritxell Serret. Junqueras no da por perdida la batalla legal por su escaño en el Parlamento Europeo y trasladó a los eurodiputados que han sufrido y siguen sufriendo “represión”.

Desde el Govern, su portavoz, Patricia Plaja, destacó que el Ejecutivo de Pere Aragonès ya mira a la siguiente pantalla: “Celebramos que haya este encuentro, y seguiremos trabajando para que el próximo pueda ser en Catalunya”. Por contra, el PP pidió cuentas al Gobierno de Pedro Sánchez por este viaje para saber “quién paga esta gira” y si el Ministerio de Asuntos Exteriores ha hecho algo para evitar que se convierta en “una campaña de desprestigio contra España”.