- El Gobierno Vasco vuelve a poner sobre la mesa su incomprensión ante el retraso de la transferencia del Ingreso Mínimo Vital y la posición de cerrazón del ministro José Luis Escrivá. El portavoz del Gobierno Vasco, Bingen Zupiria, aseguró ayer que no entiende la “resistencia” de un ministro como Escrivá a cumplir con el acuerdo, en la medida en que se trata de un pacto suscrito por el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, con el PNV. “Me extraña que haya resistencia por parte de un ministro a cumplir un acuerdo de su presidente”, dijo en Radio Euskadi, para añadir después que le “cuesta entender” esa posición. A renglón seguido, Zupiria apuntó que, en este asunto, hay altos funcionarios del Estado que consideran que ejecutar la transferencia del IMV en esos términos acordados es “romper el Estado”. Por ello, cree que al Gobierno Vasco le corresponde seguir trabajando para vencer esas resistencias.

El Gobierno Vasco rechazaba hace unos días la oferta sobre el Ingreso Mínimo Vital enviada desde el Estado en la medida en que no recoge la transferencia completa, sino una mera encomienda de gestión donde la Seguridad Social se reserva la autorización final en la concesión de la ayuda social. Lanbide actuaría como una mera ventanilla. Zupiria no entró ayer en consideraciones políticas o en lanzar un ultimátum a Escrivá, algo que corresponde al PNV.

Como portavoz del Gobierno Vasco, se limitó a decir que le extraña que Escrivá se resista tanto cuando el acuerdo lo firmó el presidente, Pedro Sánchez, con el PNV, “por eso me cuesta entender la resistencia por parte de un ministro”. Recordó que ya hace años con los recursos hidráulicos que están recogidos en el Estatuto y nunca se procedía a su transferencia, la razón radicaba en que “había altos funcionarios del Estado” que consideraban que transferir las obras hidráulicas era “romper el Estado”. “Esto ha pasado muchas veces durante 40 años y me temo que esta vez también nos estamos encontrando con algo parecido”. Apostó por que el Gobierno Vasco rompa “con ese pensamiento” y dé “una solución democrática y jurídica” a este asunto.

Por otro lado, Zupiria lamentó que, en el último año y medio, al Estado “se le ha olvidado que es autonómico y asimétrico”, sobre todo en el caso de Euskadi, que cuenta con su propio sistema de financiación. “Este año y medio, muchas veces, ese modelo de Estado ha saltado por los aires”, lamentó el portavoz del Ejecutivo. Esta alusión se produce tras las tensiones con el Gobierno de Pedro Sánchez en materia competencial, sobre las medidas sanitarias, el reparto de los fondos económicos y ahora, también, a la hora de interpretar el alcance de las transferencias.