- El PNV eleva la presión sobre el ministro José Luis Escrivá ante su cerrazón al traspaso completo del Ingreso Mínimo Vital (IMV) y le advierte de una posible “ruptura de confianza” con su Ministerio por una actitud que a su juicio “daña la credibilidad” del Gobierno de Pedro Sánchez. El responsable de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones respondió que “en ningún caso” la intención de su departamento es la de “obstaculizar” la transferencia y que los jeltzales “tienen encima de la mesa” la propuesta establecida en la disposición adicional quinta del Real Decreto-ley 20/2020, defendiendo incluso que su planteamiento “va más lejos” de lo ahí reseñado y, por ello, confía en que “seguramente” ambas administraciones se pongan de acuerdo. La formación nacionalista entiende que Escrivá pretende rebajar lo pactado y quiere que la Seguridad Social autorice los pagos. Según el criterio del dirigente socialista, Lanbide actuaría únicamente como ventanilla y asumiría las funciones iniciales del proceso: recibir las peticiones ciudadanas y trasladar la documentación al Instituto Nacional de la Seguridad Social para que dicte las resoluciones, algo que el PNV “no va a consentir”.

La disposición adicional quinta refleja literalmente que “las comunidades autónomas de régimen foral asumirán las funciones y servicios correspondientes que se atribuyen al Instituto Nacional de la Seguridad Social en relación con la prestación económica no contributiva de la Seguridad Social del Ingreso Mínimo Vital en los términos que se acuerde antes del 31 de octubre de 2020”. El ministro se apoya en el añadido donde se indica que “en tanto no se produzca la asunción de las funciones y servicios a que hace referencia el párrafo anterior, se acordará, mediante convenio a suscribir entre los órganos competentes del Estado y de la comunidad autónoma interesada, una encomienda de gestión para realizar las actuaciones que se prevean en el mismo” en relación con esta prestación. En esta tesitura, y sin que se cumpla la primera de las premisas, los jeltzales replican que el traspaso sea íntegro porque el artículo 10.12 del Estatuto de Gernika concede a la comunidad autónoma la competencia exclusiva en asistencia social y, además, tiene que incorporar esta prestación al sistema social que desde hace décadas se cimenta en la Renta de Garantía de Ingresos. Escrivá se ciñe a la encomienda pactada el año pasado con el PNV aunque fue concebida como algo temporal a la espera de que se realizara el traspaso en su plenitud. “Lo que ocurre es que en la ley del IMV hay cosas que no hace la Seguridad Social, sino otras instancias del Ministerio y estamos dispuestos incluso a hablar de ellas”, justificó el ministro.

En la sesión de control al Gobierno en la Cámara Baja, el diputado del PNV Íñigo Barandiaran acusó directamente a Escrivá de intentar dejar sin contenido la gestión de este IMV y de ignorar “de forma deliberada” sus mecanismos, “todos los medios materiales y humanos necesarios”, para su puesta en práctica. Asimismo, rechazó que “la administración vasca pueda ser tenida como subordinada a ninguna otra”, como pretende la propuesta enviada por el departamento central. “Su actitud daña no solo la credibilidad de los acuerdos alcanzados con su Gobierno y su Ministerio, sino sobre todo a la ciudadanía vasca, en especial a los más desfavorecidos, que son merecedores de la mejor política social ofrecida hoy día en el Estado”, criticó el diputado jeltzale. A su vez, el portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban, afeó las evasivas del ministro y tacha de “decepcionante” su postura. “Los términos pactados son meridianos y el régimen económico que supone el Concierto muy claro. Su resistencia, incomprensible. ¿Es consciente de los problemas que generará? No lo creo”, avisó tras el retraso acumulado de ocho meses de la transferencia y de que el propio Esteban alertara de que la “estabilidad” del propio Escrivá está en juego ante la posible remodelación del Ejecutivo de Sánchez.

Por ello, Barandiaran ve “inaceptable” su enroque y le pide que “no entorpezca” más este traspaso, siendo “consciente” de que tiene implicaciones con el Concierto Económico y con el Estatuto. “Reaccione, pero sea consciente de las consecuencias de sus actitudes”, le espetó en línea con las quejas expuestas por los portavoces de la formación nacionalista dado que, “a diferencia de lo pactado y de lo que señala la propia Ley”, el titular de Moncloa en ese área contempla retener para el Estado funciones y servicios que forman parte del contenido sustantivo del IMV. “Se lo digo muy en serio; lo contrario supondría una ruptura de la confianza con su Ministerio”, incidió el diputado del PNV.

La formación jeltzale no entiende el empeño del ministro en proceder por su cuenta, comportamiento que estaría también incomodando al titular de Política Territorial, Miquel Iceta. El PNV apuesta por la continuidad del Gobierno pero exige el cumplimiento de lo acordado, de ahí que confía en que la remodelación del Gabinete de Sánchez pueda contribuir a que se produzca una mayor coordinación entre los ministerios y se cumplan los plazos pactados. De ahí que ponga en el punto de mira la figura de Escrivá, en tanto que el IMV debió llegar el pasado octubre, en el prólogo de las transferencias pendientes. Los nacionalistas saben que pueden apretar las tuercas al ministro en otras cuestiones relativas a su cargo, en aspectos como la inmigración. Mientras, en Lakua la sintonía es total entre los socios y la vicelehendakari, Idoia Mendia, ha defendido todos estos meses que el traspaso debe ser íntegro, rechazando sin matices el documento que llegó desde Madrid.

“En razón de la especificidad que supone la existencia de haciendas forales, las comunidades autónomas de régimen foral asumirán con referencia a su ámbito territorial las funciones y servicios correspondientes que en este real decreto-ley se atribuyen al Instituto Nacional de la Seguridad Social, en relación con la prestación económica no contributiva de la Seguridad Social del ingreso mínimo vital en los términos que se acuerde antes del 31 de octubre de 2020”.

“En tanto no se produzca la asunción de las funciones y servicios a que hace referencia el párrafo anterior, se acordará, mediante convenio a suscribir entre los órganos competentes del Estado y de la comunidad autónoma interesada, una encomienda de gestión para realizar las actuaciones que se prevean en el mismo en relación con la prestación económica del ingreso mínimo vital y que permitan la atención integral de sus beneficiarios” en la Comunidad Autónoma Vasca y Nafarroa.

Se ciñe a la encomienda pactada el año pasado en el Congreso con el portavoz del PNV, Aitor Esteban, aunque fue concebida como temporal a la espera de que se realizara el traspaso con plenitud. Los jeltzales le acusan de rebajar lo pactado, algo que aseguran no consentirán.

“Ocurre que hay cosas en la ley que la Seguridad Social no hace, sino otras instancias del Ministerio”

Ministro de Seguridad Social

“Los términos pactados son meridianos. No creo que sea consciente de los problemas que generará”

Portavoz del PNV en el Congreso