- Es tan solo el último eslabón de una cadena de acercamientos de presos de ETA que el Gobierno español viene ejecutando los últimos meses. Ayer se supo que Instituciones Penitenciarias, organismo dependientes del Ministerio de Interior comandado por Fernando Grande-Marlaska, hará efectivo en breve el traslado de Francisco Javier García Gaztelu, Txapote, condenado por los asesinatos de Miguel Ángel Blanco, Gregorio Ordóñez y Fernando Buesa, a la prisión de Estremera, en Madrid. En esa misma tacada entran otros cuatro miembros de la organización armada como Irantzu Gallastegui Sodupe, Aitor Olaizola Baseta, Javier Zaballo Beitia o Ángel María López Anta, todos ellos con delitos de gravedad a sus espaldas. Las reacciones no se hicieron esperar y mientras que la AVT censuró a Interior, la presidenta de Covite -y hermana del dirigente del PP Gregorio Ordóñez- Consuelo Ordóñez aplaudió la “transparencia” mostrada por Marlaska.

“Nunca ha habido un ministro como Grande-Marlaska que haya dado información y transparencia sobre política penitenciaria”, afirmó Ordóñez a Europa Press, para posteriormente recordar que “Rajoy hizo 40 traslados y nadie dijo nada, Zapatero acercaba por la Vía Nanclares al País Vasco y el PP entonces decía que le parecía muy bien acercarlos”. Así, y lejos de criticar los acercamientos de Interior, abundó en que a Covite “nunca” le ha importado “dónde cumplen pena los etarras, nunca”, pero sí “que los que lleguen a Euskadi lo hagan arrepentidos, renegando de ETA”. Y a su juicio así viene siendo estos últimos tiempos. Por el contrario, tuvo palabras gruesas contra el actual presidente del PP, Pablo Casado, quien “no tiene muchos escrúpulos, ninguno”, y nada más llegar a la dirección del partido empezó a “utilizar, como le encanta al PP, el tema de la causa de las víctimas para embarrarlo todo”. “Me parece una estrategia muy inteligente -por la posición tomada por Marlaska-, incluso al PP así le parecía -en referencia a que “el PP prometió al PNV la transferencia de prisiones para que apoyara los Presupuestos Generales del Estado de 2018-, pero ahora quieren hacer oposición y como parece que no tienen temas, no tienen escrúpulos y usan a las víctimas y la política penitenciaria”, concluyó Ordóñez.

Por el contrario, la noticia cayó como un jarro de agua fría sobre la AVT. En una “semana de pasión y dolor para las víctimas del terrorismo”, tal y como calificaron, Instituciones Penitenciarias ha dado su visto bueno a 11 traslados, quedando ya tan solo 23 presos de ETA por trasladar. No les han dado “un respiro” ni siquiera en Semana Santa, señalaron, lo que deja bien a las claras “la sensibilidad que tiene el Gobierno de Sánchez hacia nuestro colectivo”. “No tenemos calificativos ni palabras para expresar el enorme dolor que estos acercamientos suponen para nuestro colectivo. No entendemos cómo no sólo se han traspasado todas las líneas rojas, sino que semana tras semana nos transmiten la sensación de que nuestras peticiones en política penitenciaria significan un cero a la izquierda para este Gobierno”, remarcaron.

Otro de los motivos de crítica de AVT fue que “ya son 36 los etarras que duermen en cárceles” de la CAV “sin ni siquiera haber colaborado con la Justicia, firmando unas cartas tipo de arrepentimiento con la única finalidad de ser recompensados con el traslado cerca de sus domicilios”, a la par que alertaron de la “superpoblación” de presos de ETA que en un breve lapso de tiempo habrá en las cárceles vascas.

“Rajoy hizo 40 traslados, Zapatero acercaba por la ‘vía Nanclares’ al País Vasco y al PP entonces le parecía muy bien”

Presidenta de Covite