- La única parlamentaria de Vox, Amaya Martínez, prepara ya una enmienda a la totalidad al proyecto de Presupuestos de Euskadi para 2021, ante la “falsa disposición al diálogo” del Gobierno Vasco, al que acusó ayer de “despilfarrar” el dinero público en partidas “prescindibles”.

Martínez, que ayer se reunió con el consejero de Economía y Hacienda, Pedro Azpiazu, en el marco de las negociaciones presupuestarias del Gobierno con la oposición; enmarcó el encuentro en un “mero ejercicio de cortesía institucional” y reprochó al Ejecutivo que pretenda ejercer el “rodillo” de su mayoría absoluta en el Parlamento.

La parlamentaria ultra denunció asimismo la “falsa disposición al diálogo” del consejero y censuró que el objetivo de la ronsa de partidos “no es buscar puntos de encuentros con quienes piensan diferente”.

Por su parte, el consejero Pedro Azpiazu constató la imposibilidad de llegar a algún tipo de acuerdo presupuestario con la formación de ultraderecha. Así, descartó cualquier “convergencia” con Vox, debido a las posiciones “antagónicas” que mantiene respecto a las del Ejecutivo autonómico.

Durante el encuentro celebrado en Gasteiz, Azpiazu expuso a la parlamentaria de Vox “las grandes líneas” de las Cuentas para este año, “haciendo especial énfasis en el endeudamiento”, debido al “interés mostrado” por la formación sobre las deudas que puede asumir el Ejecutivo autonómico.

Además, en la reunión, a la que Martínez ha acudido junto al también dirigente de Vox, Nico Gutiérrez; ambos dejaron “patente su posición alejada y su postura antagónica con el Gobierno”.

Según fuentes del Departamento vasco de Hacienda, consultadas por Europa Press, “además de la imposición del euskera”, los representantes de Vox critican el “gasto ideológico” que, a su juicio, se “incluye en los Presupuestos de Euskadi”.

Por ello, ante las posiciones “tan alejadas”, el consejero Pedro Azpiazu considera que “no hay convergencia en las posiciones” entre ambas partes.

Esa imposibilidad de alcanzar acuerdos la reveló también la parlamentaria de Vox, que además acusó a Azpiazu de querer trasladar una imagen “distorsionada” de la realidad a los ciudadanos. “Quieren presentarse como gente de diálogo, de consenso, cuando la realidad es justo la contraria: rodillo y nula discusión”, argumentó Amaya Martínez para censurar que esta es la “doble cara” del Ejecutivo autonómico.