- El lehendakari, Iñigo Urkullu consideró ayer que el reciente pasado de “flagrantes vulneraciones de derechos humanos” en Euskadi ha hecho que la sociedad vasca sea fuerte “en la radical deslegitimación de todas las expresiones de violencia”. Urkullu entregó en Gasteiz, en el Día Internacional de los Derechos Humanos, el premio René Cassin 2020 al médico y doctor en psicología bilbaino Carlos Martín Beristain por su defensa de los derechos humanos en Euskadi, el Sáhara y Latinoamérica, principalmente.

Durante su intervención, el lehendakari recordó que en Euskadi se sufrió “duramente demasiados años flagrantes vulneraciones de los derechos humanos, de la dignidad y la vida de demasiadas personas”. “Una dura experiencia que nos ha hecho más fuertes”, sentenció.

El premiado advirtió por su parte, de que si los mecanismos que hacen posible “el horror a gran escala” siguen sin desmantelarse, el objetivo de la no repetición de la violencia y el terrorismo puede acabar limitándose a un mero “deseo bienintencionado”. En un acto celebrado en la sede de Lehendakaritza, Martín Beristain afirmó que los derechos humanos no son una mera “declaración”, sino que están escritos “en miles de personas que son expulsadas de sus propias vidas” por las guerras, la exclusión y la miseria.

Este experto en la atención a damnificados por la violencia explicó que reivindicar la “centralidad” de las víctimas no significa que éstas tengan siempre la “razón”, sino que su experiencia y sufrimiento “no es polvo que se pueda esconder bajo la alfombra”. Al contrario, aseguró que ese dolor y esa experiencia constituyen “la base de la reconstrucción” de la convivencia. El lehendakari Urkullu agradeció a Martín Beristain su compromiso en favor de los derechos humanos de “todas las personas”, tanto en Euskadi como en el resto del mundo.