- EH Bildu cerró anoche la campaña electoral lanzada en tromba contra el lehendakari y candidato a la reelección por el PNV, Iñigo Urkullu, en su intento de acortar las distancias que, según las encuestas, le separan de los jeltzales. Maddalen Iriarte y Arnaldo Otegi criticaron la gestión del Gobierno vasco sobre los últimos rebrotes del covid-19 registrados en Euskadi, especialmente el de Ordizia, y sus efectos en las elecciones de mañana.

La candidata a lehendakari advirtió de la anomalía que supone, a su juicio, "estar cerrando la campaña sin ni siquiera saber si la Administración va a garantizar el derecho al voto" de los contagiados y los que están en cuarentena. Calificó de "grave e inaceptable", que el Gobierno vasco pretenda "hurtar el derecho democrático al voto a las personas contagiadas por el covid". Por su parte, el coordinador general de EH Bildu, acusó al Gobierno vasco de "anteponer sus intereses partidistas a la salud de los ciudadanos".

La coalición abertzale finalizó su campaña electoral en Donostia con un acto en el que la candidata a lehendakari subrayó que, aunque "los portavoces del Gobierno vasco dicen que la situación está controlada, los datos contradicen cada vez con más firmeza esas afirmaciones", en referencia a las alrededor de 200 personas que no podrán votar porque tendrán que guardar cuarentena, además de los que están pendientes de conocer el resultado de la prueba del covid. Iriarte llamó a la ciudadanía a mostrar su indignación en las urnas: "Es hora de lanzar un mensaje alto y claro a quienes han antepuesto sus intereses particulares a la salud", reiteró.

En esta línea, la candidata a lehendakari señaló que es inadmisible que dos días antes de unas elecciones la coalición de gobierno de Mendia y Ukullu traslade esta clase de incertidumbre a la ciudadanía". Iriarte denunció que los responsables del Gobierno vasco "tenían conocimiento de que existía un alto riesgo de rebrotes, no quisieron escuchar las propuestas de la oposición y ahora ni siquiera tienen un plan B para garantizar el derecho al sufragio".

A su juicio, el brote de Ordizia, que acumula 69 contagiados, ha puesto en evidencia el "descontrol administrativo" en torno a las condiciones sanitarias", ya que "cada día aparecen en los medios de comunicación diferentes focos de contagio". También criticó el "incomprensible baile de cifras" y la falta de "información clara ni medidas contundentes para poner fin a este estado general de desasosiego" y volvió a acusar a Urkullu de haber realizado ya recortes en educación, salud y cultura. En este sentido, dijo que un alto cargo del Gobierno vasco ha dimitido por estos recortes, pero no dio detalles de ello.

Tanto Iriarte como Otegi recordaron en sus alocuciones a los presos de ETA: "Hay una cosa que es una exigencia democrática y es tener con nosotros en Euskal Herria a los presos vascos y a los refugiados". El coordinador general añadió que la convivencia es inviable "mientras los presos políticos y los refugiados no estén junto a nosotros en la construcción de la república vasca".

Otegi se refirió también a los "fascistas", en alusión a Vox, a quienes auguró que se quedarán "con el casillero a cero", tras lo que aludió a Cayetana Álvarez de Toledo -portavoz parlamentaria del PP en el Congreso- como representante del "espacio de la reacción", a quien dijo que los ciudadanos vascos les dejarán el domingo "en la mínima expresión".