- La campaña gallega ofreció ayer una fotografía llamativa: la del expresidente Rajoy volviendo temporalmente a la primera línea para respaldar al candidato a la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, exponente como él del ala moderada en el PP. Feijóo defendió de manera expresa esa "moderación" y no los bloques, en presencia del presidente del PP, Pablo Casado, que ha movido al partido hacia posiciones de mayor dureza y que apuesta por la unidad de acción con C's y Vox. Feijóo rechazó ayer importar la "fragmentación política de bloques" del Estado a Galicia y defendió el "sentidiño" y la "moderación" de su gestión durante los últimos once años. Todo ello, ante Casado, que ha protagonizado los momentos más crispados de la política estatal en los últimos tiempos.

"Esto no es simplemente una cuestión de partidos, de siglas ni de logotipos. Esto es una cuestión de prioridades y, para mí, la prioridad es Galicia, Galicia, Galicia", dijo en Pontevedra. Tras rememorar el legado de Rajoy y de Manuel Fraga, el candidato popular ironizó con los discursos de los partidos rivales durante la campaña, que ponen en duda que sea del PP. En ese punto, lanzó un aviso: "Si a alguien le molesta que mi prioridad sea Galicia, el problema no lo tengo yo, lo tiene la persona a la que le molesta". Apostó por la colaboración con el Gobierno español para combatir la crisis porque "por encima de mis gustos están los gallegos y mi compromiso como representante ordinario del Estado en Galicia". El expresidente del PP y del Gobierno español, Mariano Rajoy, por su parte, proclamó que Feijóo ha dado una lección de "serenidad, tranquilidad y hacer las cosas bien".

Por otro lado, también el presidente español, el socialista Pedro Sánchez, hizo acto de presencia en la campaña gallega para respaldar al candidato Gonzalo Caballero. Su intervención la centró en la política estatal, lamentando que el Partido Popular haya mantenido en Bruselas una postura que supondría una "ultra condicionalidad" para el Estado en el acceso a los fondos, y acusó a Casado de crispar "en lugar de ayudar". "¿Si el PP no arrima el hombro ante la crisis más grave de los últimos 100 años, cuándo va a arrimar el hombro el PP?", se preguntó. A su juicio, "no es lo mismo quién gobierne una época de crisis", en alusión a su diálogo con los sindicatos y las prestaciones sociales. En cuanto a la ciudadanía, planteó un "ruego" ante los rebrotes que se han registrado en los últimos días. "No bajemos la guardia. Podemos ser muro o ser transmisor. Seamos muro", clamó Sánchez, para pedir que se mantenga al máximo la disciplina con las medidas de autoprotección.