- La gestión de la crisis sanitaria y socioeconómica por la pandemia del coronavirus parece que no pasará factura a los socios de coalición en el Gobierno vasco. PNV y PSE saldrían reforzados en las elecciones al Parlamento Vasco del próximo 12 de julio, según el Sociómetro vasco, y tendrían allanado el camino para repetir su alianza.

En esta ocasión, además, rebasarían con holgura el listón de la mayoría absoluta y, al contrario que en la pasada legislatura, no dependerían de ningún otro partido para sacar adelante leyes en el Parlamento Vasco. El barómetro asienta a EH Bildu liderando la oposición como segunda fuerza más apoyada, mientras que Elkarrekin Podemos y PP cederían posiciones.

La encuesta pronostica una subida en intención de voto del PNV y del PSE. Los jeltzales mejorarían en tres escaños sus actuales 28 parlamentarios y los socialistas lograrían once (dos más) y escalarían una posición, pasando a ser la tercera fuerza en el Parlamento Vasco, puesto que hasta ahora estaba en manos de Elkarrekin Podemos.

El Ejecutivo vasco publicó ayer una encuesta de intención de voto de cara a los comicios al Parlamento Vasco en la que PNV y PSE son las formaciones que obtienen el mayor aumento en el número de escaños, seguidos de EH Bildu, que seguiría siendo la segunda fuerza, con 19 asientos, uno más de los que tenía la pasada legislatura.

Pierde representación Elkarrekin Podemos, hasta 3 escaños y se quedaría con 8, y la coalición PP+C's no mantendría la representación anterior de los populares (9) y se quedaría con 6 parlamentarios.

La nueva Cámara vasca seguiría sin contar con representación de Vox. La formación liderada por Santiago Abascal se acercaría al escaño en Araba, experimentando así un aumento de intención de voto en este herrialde, el único en el que se presentó en 2016, ya que pasaría del 0,5% al 2,5%, medio punto menos del mínimo para obtener escaño. En Bizkaia lograría un 1,7% de los sufragios y en Gipuzkoa el 1,2%

Tampoco entraría Equo-Berdeak en el Parlamento, el partido escindido de Elkarrekin Podemos cuyo cabeza de lista es José Ramón Becerra. La encuesta se ha realizado la primera semana de este mes de junio, con un total de 1.500 entrevistas telefónicas.

Uno de los grandes interrogantes de estas elecciones es el nivel de participación debido a la pandemia. El barómetro no ofrece el dato general para la Comunidad Autónoma Vasca pero sí lo desglosa por territorios. En Gipuzkoa la abstención sería del 41%, un punto más que en Bizkaia, mientras que Araba, con el 40,5%, se quedaría entre ambos territorios. Hace cuatro años, en las elecciones autonómicas de 2016 la abstención fue del 39,98%, una cifra similar a la que predice el Sociómetro.

Si finalmente los resultados del 12-J se acercan a estos números, los electores no castigarían a los partidos gobernantes de la crisis del coronavirus sino que revalidarían la confianza en ellos por su gestión de la crisis sanitaria y la expectativa de su capacidad de gestión de la crisis económica.

Con 42 parlamentarios, jeltzales y socialistas tendrían el camino expedito para revalidar el Ejecutivo de coalición y gobernar sin apreturas. Sin embargo, a tenor de los datos arrojados por la encuesta, existiría otra opción de gobierno. La suma de EH Bildu (19 diputados), PSE (11) y Elkarrekin Podemos (8) da justo para una mayoría absoluta. Esta es la opción de la que ha hecho bandera la formación liderada por Miren Gorrotxategi durante esta precampaña.

Sin embargo, no ha encontrado receptividad en sus dos destinatarios, ya que a EH Bildu no le interesa entrar al trapo cuando es una opción poco probable y además con una formación a la que no ve lo suficientemente soberanista como para compartir mesa; y el PSE no quiere salirse de la zona de confort que le ofrece la actual coalición (ampliada con el apoyo del PNV en Madrid al Gobierno de Sánchez) para meterse en el charco de una alianza con la formación liderada por Arnaldo Otegi que no condena la violencia de ETA y ni siquiera el reciente ataque al portal de Idoia Mendia por parte de los disidentes de la izquierda abertzale.

La pérdida de tres escaños y pasar de la tercera a la cuarta fuerza en el Parlamento sería un importante revés para Elkarrekin Podemos, después de que el sector pablista desalojara en las primarias de febrero contra todo pronóstico al hasta entonces líder de la formación Lander Martínez. En estos dos meses, Gorrotxategi y su equipo han enmendado la trayectoria marcada por Martínez, que buscó el pragmatismo y los acuerdos con el Gobierno Vasco. Las elecciones del 12-J serán un examen interno que premiará o castigará la nueva dirección tomada por el partido.

El PP sería el otro partido que saldría mal parado de las elecciones, según la prospección del Gobierno vasco. Perdería tres de los nueve parlamentarios actuales, a pesar de que en estas elecciones se presenta en coalición con Ciudadanos. La formación naranja logró hace cuatro 21.477 votos en la CAV, un 2% del total; y en Araba acarició un escaño al superar incluso el 3% de los votos.

Por territorios, el PNV vuelve a ganar en las tres circunscripciones y en todas ellas obtiene un escaño más. EH Bildu sería la segunda fuerza en los tres territorios y gana un parlamentario en Gipuzkoa. Los socialistas ganan uno en Araba y otro en Gipuzkoa, mientras que el ticket PP+Ciudadanos no saca partido de la coalición y pierde uno en cada territorio. También la pérdida de escaños de Podemos es homogénea y cede uno por territorio.

Mesas electorales. Los sorteos para designar a las más de 24.000 personas que el 12 de julio estarán en las mesas electorales en los comicios vascos se llevarán a cabo entre el 13 y 17 de junio. Los cargos de presidente y vocal, o sus respectivos suplentes, son obligatorios. No acudir, sin causa justificada, el día de la votación puede suponer una pena de prisión o multa. Sin embargo, la ley electoral contempla la posibilidad de dispensar de tal obligación en algunos casos cuando exista una causa justificada y documentada.

Socios de gobierno. El PNV ganaría las elecciones y mejoraría sus resultados de hace cuatro años ya que podría conseguir 31 escaños, tres más, y el PSE, su actual socio en el Gobierno Vasco subiría dos escaños hasta los 11, con lo que la coalición superaría la mayoría absoluta, situada en 38.

Oposición. EH Bildu seguiría siendo la segunda fuerza, con 19 asientos, uno más de los que tenía la pasada legislatura. Pierde representación Elkarrekin Podemos, hasta 3 escaños y se quedaría con 8, y la coalición PP+Cs no mantendría la representación anterior de los 'populares' (9) y se quedaría con 6 parlamentarios. Vox no entraría.

Araba. El sondeo da al PNV 9 escaños (+1 sobre 2016) con una estimación de voto 3 puntos superior; a EH Bildu le da 5 (=) con 1,5 puntos más de porcentaje de voto; al PSE, 4 (+1) y sube más de 4 puntos en estimación de voto; a Elkarrekin Podemos, 3 (-1) perdiendo más de 3 puntos en voto, y al PP, 4 (-1), perdiendo casi 4 puntos.