- En una jornada en la que volvieron a producirse cuatro ataques contra sedes del PNV y del PSE, el líder de Sortu Arkaitz Rodríguez restó importancia a estos sabotajes y puso el foco en la situación del recluso Patxi Ruiz, en huelga de hambre desde el mes pasado. Así, el dirigente de la izquierda abertzale aseguró que "las pintadas se quitan con acetona", mientras que la muerte de un preso "no es reversible".
Respecto a los actos vandálicos de ayer contra sedes de partidos políticos, el PNV denunció la aparición de pintadas en los batzokis vizcaínos de Sondika y Güeñes, así como en el alavés de Okondo. En todas ellas se hace referencia a la situación de Patxi Ruiz y se reclama la amnistía de los reclusos de ETA. También el PSE hizo público un ataque contra su sede del barrio baracaldés de Cruces.
En un comunicado, el Bizkai Buru Batzar condenó los ataques y recordó que, "si bien es legítimo reivindicar los derechos de los presos y cualquier otra cuestión política", no lo es "hacerlo mediante acciones tan antidemocráticas como son las pintadas en sedes de partidos políticos". Según señalaron los jeltzales, se trata de una acción más de "aquellos que se encargan de alimentar la crispación y el conflicto, de aquellos que no quieren seguir el camino de la convivencia, de quienes solo quieren enfrentar e intimidar".
"Desde luego, si este tipo de acciones son su gran aportación a la causa que dicen defender, flaco favor le están haciendo. La única manera de encontrar soluciones es arrimar el hombro y trabajar de manera conjunta en el lugar e institución correspondiente, no en las fachadas de, cabe recordar, propiedades privadas", añade el comunicado de la Ejecutiva vizcaína del PNV. Por todo ello, la formación vuelve a exigir la condena de estas acciones a todos los partidos vascos, "en especial a EH Bildu".
Por su parte, el PSE de Bizkaia denunció también las pintadas aparecidas en la Casa del Pueblo de Cruces, en las que se podía leer Patxi S.O.S. Amnistía, y criticó de nuevo la "campaña de ataques" contra las sedes socialistas y de otros partidos que se lleva produciendo durante las últimas semanas. En un comunicado, el secretario general vizcaíno, Mikel Torres, afirmó que "ensuciar las paredes y destrozar el mobiliario público no son reivindicaciones, sino solo acciones violentas y cobardes totalmente inaceptables, que dejan claro que sus autores son solamente unos intolerantes que no saben lo que es el respeto ni la democracia".
En contraposición con los mensajes de jeltzales y socialistas, Sortu sigue sin condenar este tipo de actos y ayer minimizó su impacto. Según expresó su secretario general Arkaitz Rodríguez, partidos y medios de comunicación "llevan tres semanas hablando de pintadas, como si fueran el mayor problema del país". A su juicio, lo "grave" no son estos ataques contra sedes de formaciones políticas, sino que el Estado español "mantenga una política penitenciaria criminal".
"Es legítimo reivindicar los derechos de los presos, pero no de esta forma antidemocrática"
Comunicado
"Los autores son unos intolerants que no saben lo que son el respeto y la democracia"
Comunicado
"Lo grave no son estas pintadas, sino que se mantenga una política penitenciaria criminal"
Secretario general de Sortu
