- Como si le hubieran clavado unas agujas de vudú y se viera envuelto en un halo de mal fario, el calendario de transferencias ha sufrido constantes retrasos en los últimos meses y el Gobierno Vasco quiere que no vayan a más. Una vez recuperada la normalidad en la negociación con el Ejecutivo español para cumplir el autogobierno reconocido en el Estatuto de Gernika después de tres meses de retrasos por el coronavirus, el Gobierno Vasco quiere que la actualización del calendario de competencias se realice tomando como referencia esos tres meses de aplazamiento y no más, de manera que la gestión de las prisiones se aborde en septiembre, en cuanto se constituya un nuevo Gobierno Vasco tras las elecciones del 12 de julio. Esa competencia es una de las dos materias prioritarias para el gabinete de coalición del PNV y el PSE, junto a la gestión del régimen económico de la Seguridad Social, y estaba previsto que se abordara en junio.

En línea con lo informado por este periódico, el consejero de Autogobierno, Josu Erkoreka, confirmó ayer en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno que va a proponer a la ministra Carolina Darias que, si la Comisión Mixta que iba a ser en marzo se va a celebrar en junio para cerrar tres traspasos, esos mismos tres meses de aplazamiento se tomen de referencia para actualizar el resto del calendario. "Lo lógico sería un ajuste temporal en otros tres meses", dijo. A partir de ahí, recordó que el segundo bloque de competencias, que abarca las prisiones y otras materias como el transporte por carretera o los servicios privados de seguridad, debía negociarse en junio y cerrarse en diciembre, de manera que, aplicando los tres meses de ajuste, debería abordarse en septiembre "una vez celebradas las elecciones y constituido el gobierno". Recordó que en su momento se trabajó con el plazo de junio porque se preveía que las elecciones vascas fueran el 5 de abril y que hubiera un gobierno en condiciones de negociar esta determinante transferencia a la altura de junio. Ahora que las elecciones están previstas para el 12 de julio, el nuevo gobierno no comenzará a rodar hasta otoño. Todos los plazos encajan como un guante y llevan a la misma conclusión: negociar el traspaso en septiembre.

Erkoreka celebró que la reunión que mantuvo anteayer con Darias sirviera para retomar la normalidad en el campo del autogobierno. Confirmó que los tres traspasos que se cerrarán en junio están pactados, los tres decretos están redactados, y la cuantía de las materias asciende a 7,5 millones, de los cuales la comunidad autónoma se descontará anualmente del Cupo que paga a Madrid un 6,24% (468.000 euros). Erkoreka desgranó el alcance de los tres traspasos: la legislación de los productos farmacéuticos comprenderá actuaciones como el control de los mensajes publicitarios y la inspección de los laboratorios; el seguro escolar abarca las prestaciones sanitarias para la enseñanza universitaria y no universitaria a partir de 3º de ESO, y también confirmó la transferencia de las ayudas previas a la jubilación de los trabajadores de empresas en ERE. El calendario de transferencias abarca hasta finales de 2021, cuando estaba previsto un análisis sobre la Seguridad Social, que ahora también podría retrasarse esos tres meses.

Erkoreka se pronunció sobre el ingreso mínimo vital que aprobará pasado mañana el Consejo de Ministros de Sánchez. Aclaró que habrá que buscar la fórmula para que el Gobierno español compense a través del Concierto Económico a Euskadi. El portavoz recalcó que nunca han contemplado devolver la competencia vasca o dejar de pagar la RGI autonómica, sino completar la ayuda estatal.

"Es muy importante volver a la normalidad; por primera vez en la historia hay calendario"

Consejero de Autogobierno