barcelona - El conseller de Acción Exterior de la Generalitat, Alfred Bosch, dimitió ayer tras los casos de presunto acoso sexual protagonizados por el que fue su jefe de gabinete, Carles Garcias Hernández, que fue cesado en enero por este asunto. Lo anunció en una comparecencia sin preguntas junto a la portavoz del partido, Marta Vilalta, después de una reunión de la Ejecutiva Nacional de ERC. "La situación creada en las últimas horas se ha hecho insostenible y tengo muy claro que hago más servicio marchándome que quedándome", explicó Bosch.

El diario Ara publicó ayer que Bosch cesó a Garcias por casos de presunto acoso sexual, pese a que en un principio y cuando se lo pidió ERC, el conseller fue reticente a hacerlo y planteó reubicarlo en otro cargo de la Generalitat. El ya exconseller reconoció que no ha sabido gestionar este caso lo suficientemente bien y se disculpó por ello: "He intentado resolver un caso de presuntos acosos de la mejor manera que he creído. Lo he hecho desde la lealtad a ERC y también con la lealtad de ERC hacia mí. Seguramente no lo he sabido hacer lo suficientemente bien ni rápido".

"Lo lamento, sobre todo por la indefensión de las mujeres que han sido víctimas. Está claro que me toca asumir toda la responsabilidad de lo que ha sucedido en el Departamento de Acción Exterior", afirmó. Bosch, que era una de las voces de ERC representadas en la mesa de diálogo entre Moncloa y el Govern, recordó que entró en política hace nueve años junto al líder de ERC, Oriol Junqueras, al que le prometió "que no venía a estorbar, sino a servir a una causa y a un país inmensamente más grandes que nadie".

También quiso poner en valor el "año de trabajo intenso" al frente de la Conselleria, ya que destacó que se han desplegado 15 delegaciones en el extranjero y se ha hecho el aumento más grande en el Presupuesto de cooperación. "Hoy he presentado mi dimisión como conseller pidiendo que se acepte. Agradeciendo la ayuda de todas aquellas personas que me han acompañado a lo largo de esta experiencia laboral. ¡Viva Catalunya libre!", concluyó.

En la misma comparecencia, Marta Vilalta defendió la actuación de ERC ante este caso: "Hemos actuado con contundencia porque no puede haber ningún tipo de tolerancia con actuaciones machistas o con comportamientos de acosos sexuales". Alegó para ello que se activó una investigación interna sobre los casos, se suspendió de militancia de manera cautelar a Garcias y se le cesó como jefe de gabinete. "Desde ERC somos autoexigentes, hoy hemos puesto el listón de exigencia donde debe estar: arriba del todo. Ninguna tolerancia con valores que no son republicanos", dijo.

Torra pide explicaciones Carles Garcias fue cesado el 24 de enero como jefe de gabinete de Bosch, aunque el relevo pasó desapercibido porque se desconocían sus causas. Poco después de que Ara revelara ayer que fue por un caso de acoso sexual continuado a diversas trabajadoras del departamento de Acción Exterior, ERC emitió un comunicado para explicar que decretó la suspensión cautelar de su militancia y de sus cargos internos.

El episodio, según el diario, derivó en un tira y afloja entre Bosch, que barajó incluso recolocar a Garcias en otro cargo, y la dirección de ERC, que acabó exigiendo al conseller que lo destituyera, tras aflorar el testimonio de al menos ocho víctimas. La mano derecha de Bosch hacía presuntamente un marcaje constante a las trabajadoras de su equipo, ya fuese en la sede de la Conselleria, en actos o en viajes, con comentarios, mensajes e insinuaciones, en los que insistía en verse a solas con ellas, y a las que se dirigía a menudo con un lenguaje sexista.

Las explicaciones de ERC, sin embargo, no convencieron al president de la Generalitat, Quim Torra, que convocó en la mañana de ayer a Bosch para exigirle explicaciones por la "no activación del protocolo para la prevención, la detección, la actuación y la resolución de situaciones de acoso sexual". Torra le anunció la apertura de una actuación desde la inspección de servicios de personal de Función Pública para aclarar los motivos por los que no se activó el "protocolo obligatorio" en la Generalitat y le instó a colaborar en la investigación.

En un comunicado, la Oficina del president destacó que la Conselleria de Bosch no comunicó el caso a la dirección general de Función Pública. En plenas tensiones entre ambos socios del Govern, a la espera de que Torra anuncie la fecha de las próximas elecciones catalanas, las críticas a Bosch se multiplicaron desde las filas de JxCat, lo que provocó malestar en el seno de ERC.

Bosch recibió ayer las críticas de JxCat, PSC y Ciutadans, que le pidieron explicaciones por su actuación y reclamaron que comparezca en el Parlament para explicar cómo ha gestionado estos casos.