- El Gobierno de Haití intensificó ayer la operación policial para capturar a los autores del asesinato del presidente Jovenel Moise, y anunció el arresto de 17 de los 28 supuestos implicados. Quince colombianos y dos estadounidenses de origen haitiano están bajo la custodia de la Policía, mientras que otros tres ciudadanos colombianos fueron abatidos en tiroteos con las fuerzas de seguridad, según el primer balance oficial en el que se revela la nacionalidad de los supuestos “mercenarios”.

Los otros ocho miembros del comando que participaron en el asalto a la residencia de Moise en la madrugada del miércoles, también colombianos, se encuentran fugados y son buscados “activamente”, según detalló el director general de la Policía, Léon Charles.

Once de los sospechosos del asesinato fueron detenidos en la embajada de Taiwán en la capital haitiana, confirmó ayer la propia legación diplomática. La representación diplomática taiwanesa aseguró en un comunicado que “este jueves 8 de julio de 2021, por la mañana, la policía haitiana tuvo la intención de ingresar en la Embajada para perseguir a los sospechosos” que habían ingresado en la legación y que posteriormente detuvo. Se trató de una operación que “fue autorizada de inmediato, para demostrar” el compromiso de Taipei con el pueblo haitiano y permitir que se “descubra la verdad del incidente lo antes posible”. La policía haitiana, señalaba el comunicado, “inició una operación alrededor de las 4 de la tarde (hora local) y arrestó con éxito a once sospechosos”.

Las operaciones policiales contaron con el apoyo de decenas de ciudadanos anónimos, que encontraron y atraparon a dos de los sospechosos que estaban escondidos en el barrio de Jalousie, de la capital haitiana.

Los extranjeros fueron atados con cuerdas y conducidos hasta la comisaría del barrio de Pétion-Ville, donde una turba se arremolinó para tratar de linchar a los detenidos y después prendió fuego a tres automóviles que supuestamente pertenecían a la banda.

Además, un fiscal de Puerto Príncipe ha llamado a declarar a los cuatro principales responsables de la seguridad personal de Moise. Los cuatro oficiales han sido convocados a declarar entre el lunes y el jueves de la semana próxima, aunque no se especifica si en calidad de investigados o de testigos.

Claude Joseph, quien está al frente del país tras la muerte de Moise, volvió a llamar a la población a mantener la calma y a evitar los actos de vandalismo. La Oficina de Protección al Ciudadano (OPC), un organismo independiente de promoción de los derechos humanos, alertó que se está asistiendo a “una caza contra los latinoamericanos con el pretexto de buscar a los mercenarios”.

Desde que se conoció la noticia del magnicidio varias embajadas extranjeras han recomendado a sus ciudadanos evitar salir de sus casas. A pesar de estas tensiones y de mantenerse el estado de sitio decretado el miércoles, el Gobierno dio el jueves los primeros pasos para volver a la normalidad, con la reapertura del aeropuerto internacional de Puerto Príncipe y un llamamiento a los funcionarios a volver a sus puestos de trabajo.

Por la implicación de extranjeros, el Gobierno haitiano pidió apoyo internacional para investigar el asesinato, según aseguró la enviada de la ONU al país, Helen La Lime, al margen de una reunión a puerta cerrada del Consejo de Seguridad convocada de urgencia para abordar la crisis.

El Gobierno colombiano dijo haber recibido una solicitud formal de información a través de la Interpol y se comprometió a enviar fechas, horas de vuelo e información financiera a las autoridades colombianas.

La Casa Blanca dijo que quiere ayudar en la investigación del magnicidio, pero aseguró que por ahora no ha recibido ninguna petición de asistencia por parte de Haití.

Durante la reunión del Consejo de Seguridad, República Dominicana fue el país que defendió con una mayor vehemencia la necesidad de prestar asistencia a Haití para garantizar la seguridad del país y evitar que la inestabilidad se extienda a su territorio.

El embajador dominicano en la ONU, José A. Blanco, aseguró que las autoridades de su país no tienen hasta ahora ninguna información de que los asesinos hayan viajado desde su país o hayan huido hacia República Dominicana.

En el plano internacional, Joseph recibió el pasado jueves el respaldo expreso de la ONU y de Estados Unidos, después de que en Haití fuera cuestionada su legitimidad para estar al frente del Ejecutivo. Estados Unidos aseguró que seguirá trabajando con Joseph en su rol de primer ministro, ya que él estaba ejerciendo como primer ministro antes del asesinato, según declaró el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price. La representante de la ONU para Haití, Helen La Lime, también apoyó a Joseph como primer ministro, a pesar de admitir que hay “ciertas tensiones” y diferentes interpretaciones de la Constitución en cuanto a la sucesión presidencial.

La legitimidad de Joseph ha sido puesta en tela de juicio por Ariel Henry, a quien Moise nombró primer ministro el lunes pasado, en el último decreto que firmó. Henry, que no llegó a tomar posesión del cargo, dijo que no pretende “echar leña al fuego”, pero pidió hablar con Joseph para tratar de construir un consenso con la oposición.

Comisión. El presidente colombiano, Iván Duque, acordó ayer con el primer ministro interino de Haití, Claude Joseph, el envío de una comisión desde su país para apoyar la investigación por el magnicidio del presidente Jovenel Moise, en el que presuntamente están implicados varios colombianos. “Ofrecemos toda la colaboración para encontrar la verdad sobre los autores materiales e intelectuales del asesinato del presidente Jovenel Moise”, dijo Duque en su cuenta de Twitter. El jefe de Estado colombiano ordenó al director de la Dirección Nacional de Inteligencia (DNI), viajar a Haití con un equipo de la Interpol Colombia “para unirse al esfuerzo de las autoridades” de ese país.